El secretario general de la ONU, António Guterres, advirtió que los riesgos de una escalada regional más amplia, a raíz del conflicto entre Israel y el movimiento palestino Hamás, se están convirtiendo en una realidad.
Durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU este martes, Guterres renovó su llamamiento a un "alto el fuego humanitario inmediato", para garantizar que la ayuda llegue a donde se necesita, facilitar la liberación de los rehenes y rebajar las tensiones en Oriente Medio.
"Los riesgos de una escalada regional más amplia se están convirtiendo en una realidad", destacó, señalando que, en la frontera norte, los intercambios diarios de ataques entre las Fuerzas de Defensa de Israel y la organización chiita libanesa Hezbolá, han causado la muerte de decenas de civiles y ha forzado a miles de personas a abandonar sus hogares en ambos bandos.
"El riesgo de un error de cálculo es peligrosamente alto", alertó Guterres. "Insto a todas las partes a que se abstengan de una retórica agresiva y a que pongan fin inmediatamente a las actividades que puedan exacerbar aún más las tensiones", afirmó.
Asimismo, el jefe de la ONU catalogó la situación en el mar Rojo de "muy preocupante". "La desescalada es esencial, y todos los ataques contra buques mercantes y comerciales en el mar Rojo deben cesar de inmediato", aseveró.
Durante las últimas semanas, la situación en Oriente Medio se intensificó significativamente. Aparte de la guerra entre Hamás e Israel, la zona está sacudida por los ataques de los hutíes en el mar Rojo y las medidas de represalia de EE.UU. y sus aliados contra instalaciones de los rebeldes en Yemen. El pasado sábado, varios asesores de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán murieron como resultado de un ataque israelí en Damasco, la capital de Siria.