El Tribunal de Apelaciones del Vaticano condenó este martes a dos años y medio de prisión a un sacerdote italiano por el delito de "corrupción de menores". Se trata del primer fallo por violencia sexual dictado dentro de ese Estado soberano.
"Este es el primer veredicto que trata sobre violencia sexual y condena a alguien por ello dentro del Vaticano. Desde este punto de vista, esto es histórico", afirmó Laura Sgro, abogada de la víctima, citada por el diario The Washington Post.
El implicado, Gabriele Martinelli, de 31 años, es acusado de abusar sexualmente de un exmonaguillo de forma reiterada, entre 2007 y 2012, cuando ambos eran menores y estudiaban en el preseminario San Pío X, ubicado dentro de los muros de la Santa Sede, recoge el servicio de noticias Catholic News Agency.
Martinelli, nombrado sacerdote en la diócesis de Como (Italia) en 2017, había sido absuelto de todos los cargos en un primer juicio en octubre de 2021, argumentando que no había evidencia de que hubiera usado coerción sobre la víctima, identificada con las siglas L.G. Esa persona había relatado en una audiencia, meses antes, que el sacerdote se metía en su cama y él terminaba "resignado a la violencia" porque solo "era un niño".
Los escándalos de abuso estallaron en 2017 cuando exmonaguillos hicieron públicas acusaciones de mala conducta por parte de Martinelli y encubrimiento por parte de los superiores del seminario. Sin embargo, el Vaticano no pudo seguir el caso, ya que las denuncias se presentaron fuera del plazo de prescripción de un año. Hasta entonces, se habían ignorado en gran medida las acusaciones contra Martinelli y solo se realizaron investigaciones rápidas y superficiales.
Finalmente, luego de que en 2019 el papa Francisco levantara la causa de inadmisibilidad, se inició en 2020 un primer juicio en el que fue declarado no punible, entre otros, por los hechos impugnados hasta el 2 de agosto de 2008, por ser menor de 16 años. Posteriormente, el promotor de justicia Roberto Zannotti y la abogada Sgro interpusieron un recurso contra la sentencia, y este 23 de enero el Tribunal de Apelaciones del Vaticano revirtió parcialmente la decisión del tribunal de 2021, explicó Vatican News.
Según lo dispuesto en la sentencia, vista por la agencia ANSA, se confirmó la existencia de "delito de corrupción de menores" por hechos ocurridos entre el 9 de agosto de 2008 y el 19 de marzo de 2009, periodo que se considera que estaba dentro del plazo de prescripción, cuando Martinelli era mayor de edad y la víctima menor de edad.
Además de la pena de prisión, a Martinelli también se le impuso una multa de 1.000 euros (1.089 dólares) y debe cubrir los honorarios legales de la víctima. Según The Washington Post, la condena, que aún puede apelarse ante el Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica —máxima autoridad del Vaticano—, no señala si podrá seguir siendo sacerdote o no.