La Federación de Fútbol de Bélgica tomó una decisión histórica ordenando la repetición de un partido de la máxima categoría después de que un error del sistema de asistencia de videoarbitraje (VAR) provocara una mala aplicación de las reglas del juego.
El incidente ocurrió en el encuentro entre el Anderlecht y el Genk disputado el pasado 23 de diciembre, en el que el local se impuso 2-1. A los 22 minutos de juego, cuando el marcador estaba 0-0, Bryan Heynen, jugador del Genk, ejecutó un penalti que fue rechazado por el portero. El balón cayó a los pies del visitante Yira Sor, quien remató a la portería y encontró el gol.
Sin embargo, el árbitro Nathan Verboomen, ante la recomendación del VAR, anuló el punto debido a una supuesta invasión de área por parte de Sor al momento del penalti, pero la repetición mostró que también dos jugadores del Anderlecht habían incurrido en la misma falta. Según el reglamento, esta situación debía haber resultado en la repetición de la pena máxima.
Tras el escándalo, el organismo arbitral belga dictaminó inicialmente que el partido no se repetiría, ya que consideraron el incidente como un error del VAR y no una mala aplicación de las reglas. No obstante, el Genk apeló la decisión ante el Consejo Disciplinario del Fútbol Profesional belga, quien anuló la disposición anterior y ordenó que el encuentro se juegue una vez más.
"El Consejo Disciplinario del Fútbol Profesional ha dictaminado que el partido Anderlecht-KRC Genk de finales del año pasado debe repetirse", comunicó el viernes el Genk. "El Consejo siguió entonces el argumento del KRC Genk de que la dirección del partido aplicó incorrectamente las normas en la fase de penalización en cuestión", destacó, agregando que espera que pronto se encuentre una fecha para volver a jugar el partido.