El presidente de EE.UU., Joe Biden, "debería hacerse una prueba de aptitud mental inmediatamente" y los resultados "deberían compartirse con el público", escribió este viernes la precandidata republicana a la presidencia de EE.UU. Nikki Haley en su cuenta de X.
"Joe Biden no puede recordar acontecimientos importantes de su vida, como cuándo fue vicepresidente o cuándo falleció su hijo. Es triste, pero será aún más triste tener en la Casa Blanca a una persona que no está mentalmente preparada para el puesto más importante del mundo", afirmó Haley.
Las declaraciones de la precandidata tuvieron lugar después del discurso no anunciado del mandatario, en el que comentó el informe del Departamento de Justicia derivado de una investigación por el manejo de documentos clasificados. Aunque los fiscales especiales decidieron no presentar cargos contra él, sí advirtieron sobre las "limitaciones significativas" en la memoria del presidente, por lo que este se vio obligado a justificarse ante las dudas por su estado de salud.
"No recordaba, ni siquiera al cabo de varios años, cuándo murió su hijo Beau", se detalla en el reporte, agregando que las capacidades cognitivas son "borrosas" y "pobres".
Al respecto, Biden criticó duramente el diagnóstico. "Hay referencia de que no recuerdo cuándo murió mi hijo. ¿Cómo diablos se atreve sugerir eso? No necesito que nadie me recuerde cuándo falleció", expresó. "Francamente, cuando me hicieron esa pregunta, pensé: 'No es asunto tuyo'", manifestó, relatando que estuvo sentado "por cinco horas durante dos días [hablando] de acontecimientos que se remontan a 40 años atrás" mientras al mismo tiempo "gestionaba una crisis internacional", en relación al recrudecimiento del conflicto palestino-israelí.