El Tribunal de Apelaciones de La Haya ha ordenado este lunes a Países Bajos que cese todas las exportaciones de piezas de aviones F-35 a Israel en un plazo de siete días, anulando el fallo de un tribunal inferior que había respaldado al Gobierno en enero, al permitirle que siga enviando a los israelíes los repuestos de propiedad estadounidense almacenados en la ciudad de Woensdrecht.
"Es innegable que existe un claro riesgo de que las piezas exportadas de los F-35 se utilicen en graves violaciones del derecho internacional humanitario", dijo el juez Bas Boele en declaraciones recogidas por AP mientras leía el fallo, que podrá ser apelado.
Los abogados del Gobierno afirmaron que prohibir las entregas de piezas de los F-35 desde Países Bajos carecería de sentido, ya que EE.UU. podría hacerlo desde cualquier otro lugar.
En diciembre del año pasado, tres organizaciones de derechos humanos presentaron una demanda civil contra el Gobierno neerlandés, argumentando que las autoridades necesitaban reevaluar la licencia de exportación a la luz de la ofensiva israelí en la Franja de Gaza.
Sostenían que la entrega de piezas para los aviones de combate convierte a Países Bajos en cómplice de posibles crímenes de guerra cometidos por Israel en su guerra contra Hamás. Sin embargo, en enero, un tribunal se puso del lado del Gobierno.