La Unión Europea decide contabilizar por separado sus ingresos provenientes de los activos rusos
El Consejo de la Unión Europea ha adoptado este lunes una decisión y un reglamento que obligan a los depositarios centrales de valores (DCV) que poseen activos y reservas del Banco de Rusia por valor de al menos 1 millón de euros (cerca de 1.078.000 dólares), que están congelados desde febrero de 2022, a contabilizar por separado los ingresos acumulados por el uso de estos fondos.
Asimismo, se prohíben las transacciones con los activos rusos en poder de las instituciones financieras en los Estados miembros de la Unión Europea y disponer de los beneficios netos resultantes, comunica el Ejecutivo comunitario.
La medida "allana el camino" para una futura normativa del Consejo que buscaría requisar las ganancias y redirigirlas para el apoyo a Ucrania, "su recuperación y reconstrucción en una fase posterior". "Esta contribución financiera podrá canalizarse a través del presupuesto de la UE para el Mecanismo para Ucrania, sobre el que el Consejo y el Parlamento Europeo alcanzaron un acuerdo provisional el 6 de febrero de 2024", explica el comunicado oficial.
El Kremlin advirtió en diciembre pasado que, si se incautan ilegalmente los activos rusos, se afectará al sistema financiero global y que habrá consecuencias jurídicas y una respuesta de parte de Moscú. "El tema no es aceptable" para las autoridades rusas y también es "peligroso para el sistema financiero mundial", dijo el secretario de prensa de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.