La Fraternidad, el sindicato de maquinistas de locomotoras y trenes de Argentina, realizó este miércoles una huelga de 24 horas para exigirle al presidente Javier Milei alzas salariales que contrarresten los altos niveles de inflación registrados durante el último año.
"La Fraternidad informa que las molestias que el público usuario sufre el día 21 es única, total y absoluta responsabilidad del Gobierno nacional", afirmó el gremio en un comunicado.
También acusó a las autoridades de haber incumplido con la ley, ya que previo a un paro, tiene la potestad de convocar a una conciliación obligatoria para negociar y frenar la medida de fuerza, pero no lo hizo.
"El Gobierno nacional no puede desconocer la ley que defiende a los usuarios y establece un método conciliador, por lo que su actitud viola la paz social, los derechos constitucionales y agravia a los usuarios y a los trabajadores ferroviarios en general", advirtió.
De esta forma, las estaciones de trenes ubicadas en el Área Metropolitana de Buenos Aires lucieron cerradas y vacías, lo que afectó a más de un millón de pasajeros que tuvieron que buscar formas alternas para transportarse en una jornada marcada por la tensión.
Demandas
Los ferroviarios reclaman una recomposición salarial ya que, durante el último año y debido a los altos niveles de inflación, perdieron el 55 % de su poder adquisitivo.
Sin embargo, el Gobierno, además de recortar subsidios al costo del pasaje, lo que repercutirá en drásticos aumentos para los pasajeros, se niega a incrementar los ingresos de los trabajadores en todos los rubros.
El paro de hoy apenas fue una muestra de la creciente conflictividad sindical, ya que mañana realizarán una huelga los trabajadores de la sanidad, y el próximo lunes, los estatales y docentes.
Además, a diario se incrementa el reclamo para que la Confederación General del Trabajo (CGT) convoque a un segundo paro general luego del llevado a cabo el pasado 24 de enero.
De hecho, Pablo Moyano, dirigente de la CGT y del sindicato de Camioneros, confirmó que se prepara una nueva huelga nacional contra Milei. "Lamentablemente esto va a terminar mal", advirtió al anticipar que marzo será un mes muy complicado.
Amenazas
El Gobierno respondió con amenazas al paro de trenes, ya que el vocero presidencial, Manuel Adorni, informó que están evaluando las sanciones que aplicarán a los gremios.
"Hoy, un millón de personas se quedaron sin su medio de transporte. Todos los responsables de esta medida de fuerza, que no es contra el Gobierno nacional sino contra la gente, por supuesto que se están evaluando las medidas para que no queden sin consecuencias", dijo.
Adorni subrayó que este Gobierno sólo lleva 73 días de gestión "y no 70 años", lo que vuelve inexplicable la huelga.
"Esta práctica habitual de obstruir la vida de los argentinos, en virtud de mantenerse en el poder, no va más. Por otro lado, el presidente lo ha reiterado en un sinfín de oportunidades: no dará marcha atrás, no se va a mover de su mandato y por lo que la gente lo votó: o 'la casta' o el camino de la libertad", dijo.
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