El ELN intensifica las críticas al Gobierno de Colombia tras poner el diálogo en el congelador

El primer comandante del grupo guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN), alias 'Antonio García', denunció este lunes que el Gobierno de Colombia recurre a los medios de comunicación para ejercer "presión" en el proceso de diálogos de paz, para así tratar de imponer su opinión y forzar acuerdos.

El jefe guerrillero indicó a través de la red social X que "el uso de los micrófonos por fuera de la mesa" de diálogos, ha sido "prioritario" y "recurrente" por parte de los miembros de la delegación gubernamental para los diálogos con el ELN, sobre todo cuando se alcanza un acuerdo que no les satisface.

'García' también denunció que los funcionarios de gobierno "rehuyen" a los temas abordados cuando están en las conversaciones oficiales con el ELN y no dan "respuestas coherentes" para avanzar en las conversaciones.

"Cuando al final se logra algún acuerdo, de inmediato salen por los micrófonos a desvirtuar lo acordado para tratar de imponer en la opinión su criterio unilateral, no lo acordado", dijo el líder rebelde en medio de las crecientes tensiones que mantiene la guerrilla con la representación gubernamental.

'García' agregó que la actuación de los voceros del gobierno siempre busca "ganar en la opinión lo que en la mesa no se ha pactado y así tratar de forzar al ELN para que acepte acuerdos por presión de los 'medios'".

El jefe guerrillero advirtió que aunque ese "ha sido el método preferido de negociación" por parte del Gobierno, para el ELN resulta "inaceptable" ese tipo de comportamiento y se convierte en una condición a cumplir en el avance de los diálogos de paz que actualmente se encuentran suspendidos por parte del grupo rebelde.

"Una crisis que puede ser muy buena"

El ELN anunció la semana pasada que había decidido suspender temporalmente la mesa de diálogo con el Gobierno de Gustavo Petro, tras denunciar que las autoridades no han cumplido con las obligaciones acordadas a lo largo del proceso. Por su parte, Bogotá rechazó la medida unilateral y advirtió que esta situación genera una crisis innecesaria y prolonga el conflicto.

Tras conocerse la suspensión temporal, el alto comisionado para la paz del Gobierno colombiano, Otty Patiño, dijo al medio local W Radio que a pesar de que la postura del ELN puede prender las alarmas del proceso de diálogo, también podría convertirse en un momento de "reflexión" para avanzar en los puntos álgidos.

"Es una oportunidad para que el ELN se repiense a sí mismo, piense sus relaciones entre su dirección y los frentes, es una crisis que puede ser muy buena", señaló Patiño, quien además aclaró que pese a la suspensión de los diálogos, el cese al fuego pactado no está en riesgo.

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Patiño dijo que a lo interno del ELN hay diferencias con respecto al proceso de paz, porque "algunos frentes" del grupo armado tienen "divergencias positivas y otras negativas con respecto a lo que se plantea en la mesa". Por ello, indicó que espera que la guerrilla pueda cohesionarse y tener una "unidad de mando" que "no conduzca a la inacción sino a una acción de introspección muy seria".

Con respecto a las diferencias internas de la guerrilla, Patiño comentó que mientras en el departamento de Nariño "piensan que la paz debe avanzar más rápido" de lo que ha logrado la delegación del ELN en la mesa; en el Frente Occidental "siempre" hay "negativas" y decretan paros armados cuando las partes logran acuerdos.

"El congelamiento puede significar un momento de reflexión, es importante que no signifique un estado de hibernación", expresó Patiño, quien está dispuesto a promover una reunión extraordinaria entre las dos delegaciones para bajar las tensiones y aclarar los puntos que han generado la crisis actual de los diálogos.

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