La reacción de Alemania después de la difusión de una comunicación entre militares de alto rango suyos indica la falta de responsabilidad de las autoridades del país europeo ante su sociedad, así como lo distorsionada que es la función de los medios de comunicación, que están al servicio del Gobierno, ha expresado la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova.
"Los comentarios de los organismos gubernamentales alemanes acerca del escandaloso audio o bien no proceden de sus portavoces ni de declaraciones escritas publicadas en sus recursos verificados en Internet, sino de los medios de comunicación con referencias a fuentes anónimas; o bien son monstruosamente multidireccionales", escribió la vocera en su canal de Telegram.
Zajárova citó como ejemplo las confirmaciones por el Ministerio de Defensa alemán a través de las agencias DPA y Tagesshau de que se había interceptado una conversación entre militares alemanes sobre los supuestos planes para atacar el puente de Crimea. "De nuevo todo anónimo y por tanto irresponsable", comentó.
Estas circunstancias, sostuvo, indican que "las élites, el Gobierno y el pueblo no rinden cuentas entre sí ni se retroalimentan". Mientras que "la única razón de ser de los medios de comunicación en Alemania es mantener la ilusión de una democracia popular". "Se distorsiona toda la información, se dirige su presentación y se quita la responsabilidad a las autoridades", resaltó.
En lugar de una democracia, lo que gobierna Alemania es una "fuerza invisible (y desconocida) para el votante alemán y ajena al sistema electoral" que "existe dentro del aparato estatal". "Los alemanes tienen ahora una oportunidad única de salvarse: tirarse de esta cuerda y conseguir que las autoridades oficiales hablen directamente de lo que ocurre en Alemania [...], hacia dónde va el país y quién lo dirige", sugirió.