Personal militar de la OTAN ya está presente en el territorio de Ucrania para controlar el armamento suministrado a Kiev, así como también para llevar a cabo operaciones de inteligencia y entrenar a las tropas, según reportó este lunes el diario El País.
Durante más de dos años, múltiples fuentes militares ucranianas y de países de la Unión Europea indicaron al medio que la Alianza Atlántica disponía de informantes en el terreno tanto para proporcionar datos sobre la situación en la línea de contacto, como identificar la eficacia de las armas suministradas, posibles problemas de uso y probables casos de corrupción con la ayuda prestada.
Algunos informantes no oficiales son militares extranjeros retirados que participan en operaciones de combate en las filas de las Fuerzas Armadas de Ucrania, supuestamente de forma voluntaria. Además, dos de las fuentes del periódico afirmaron que Washington es especialmente activo en el control de la asistencia que presta.
A principios de marzo, el ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radoslaw Sikorski, declaró que algunos países de la OTAN ya habían mandado fuerzas a Ucrania, afirmando que su presencia allí "no es algo impensable". De esa manera, el canciller apoyó las declaraciones del presidente francés, Emmanuel Macron, quien sugirió la posibilidad de enviar tropas occidentales a territorio ucraniano.
En febrero, Macron sostuvo que no se debe descartar el envío de tropas occidentales a Ucrania, desatando la polémica en la UE. El mandatario insistió en su idea, indicando que "Rusia no puede ni debe ganar esta guerra", que calificó de "existencial" para Francia.
Desde el Kremlin advirtieron que si Occidente envía sus fuerzas militares al país eslavo, no se podrá evitar un conflicto directo entre Rusia y la OTAN.