Los autores del atentado terrorista en la sala de conciertos Crocus City Hall serán debidamente castigados, declaró el sábado a la prensa el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolái Pátrushev.
"Sin duda, los responsables de las muertes masivas no quedarán impunes", dijo. También expresó su más sentido pésame a las familias de los fallecidos y heridos.
Según el funcionario, el ataque es una clara prueba de que "el terrorismo es una amenaza significativa para la seguridad, que requiere el máximo esfuerzo coordinado de todos los ciudadanos, servicios especiales, fuerzas del orden y autoridades a todos los niveles para prevenir la actividad terrorista".
El viernes, varios individuos armados con fusiles irrumpieron en la sala de conciertos Crocus City Hall de la provincia de Moscú, matando a más de 90 personas, entre ellos 3 niños.