El afán por promover la energía 'verde' amenaza a especies animales en África, según un estudio

"El abandono de los combustibles fósiles es bueno para el clima, pero debe hacerse sin poner en peligro la biodiversidad", afirma la investigadora principal del estudio.

La extracción de minerales y metales utilizados para producir tecnologías de energía limpia puede generar graves consecuencias para los simios. Un tercio de los grandes simios de África podrían verse gravemente perjudicados por el afán humano de promover la energía 'verde', asevera la organización conservacionista Re:wild, una de las instituciones que participó en una investigación recientemente publicada en la revista Science Advances.

La creciente demanda de minerales, como cobre, litio, níquel, cobalto u otros elementos de tierras raras, que son necesarios para avanzar en la transición a gran escala hacia la utilización de energías más limpias, aumenta la actividad minera en África, donde una gran parte de esos recursos se encuentra sin explotar. Esto impulsa la deforestación de los bosques tropicales, hábitat de muchas especies, entre ellas de los grandes simios, los parientes vivos más cercanos al hombre.

Utilizando datos de explotaciones mineras en 17 países africanos, un grupo de científicos analizó cómo impacta la actividad en las poblaciones locales de grandes simios, tales como gorilas, chimpancés y bonobos (chimpancés pigmeos). 

Así, alrededor de los yacimientos, determinaron zonas de amortiguamiento de 10 kilómetros para explorar las consecuencias directas de la extracción en los animales, en cuanto a la destrucción del hábitat y la contaminación tanto acústica como lumínica. Además, establecieron otras zonas de amortiguamiento más amplias, de 50 kilómetros, para analizar los efectos indirectos, como la construcción de nuevas carreteras e infraestructura.

El análisis evidencia que las poblaciones de grandes simios se ven particularmente afectadas por la minería en Liberia, Sierra Leona, Mali y Guinea, con enormes cantidades de ellos viviendo en ambas zonas de amortiguamiento. Por ejemplo, en el caso de Guinea, las actividades mineras podrían impactar directa e indirectamente en más de 23.000 chimpancés (el 83 % de los que hay en el país).

En total, la extracción de estos minerales pone en riesgo a unos 180.000 grandes simios, es decir, una tercera parte de la población africana de esas especies, estiman los investigadores. Al respecto, la publicación también destaca que debido a que las empresas mineras no tienen la obligación de hacer públicos los datos sobre la biodiversidad, el impacto real posiblemente sea aún mayor.

"El abandono de los combustibles fósiles es bueno para el clima, pero debe hacerse sin poner en peligro la biodiversidad", afirma Jessica Junker, investigadora principal del estudio. "En su versión actual, puede que incluso vaya en contra de los objetivos medioambientales que perseguimos", concluye.