Los jefes de Estado de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) se reunirán este martes para debatir el asalto de la Embajada mexicana en Quito, que culminó con la detención del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, quien gozaba de asilo diplomático al momento de su captura.
En su conferencia de prensa matutina, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, explicó que la reunión tendrá lugar a las 9.00 (hora de la Ciudad de México, 15.00 GMT), y versará "básicamente" sobre ese tema, que derivó en la ruptura de relaciones diplomáticas entre México y Ecuador y una denuncia mexicana ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
"Nosotros estamos atendiendo la denuncia que se presentó en la CIJ por la violación a nuestra soberanía, el derecho internacional, eso es lo que tiene para nosotros prioridad; desde luego, el derecho al asilo, que no solo incumbe a un país, a México, de que no se viole el derecho internacional, el que se respete el derecho al asilo", sostuvo López Obrador en adelanto a lo que será su intervención en el encuentro.
Por su parte, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunció que Caracas exigirá a Quito que regrese a Glas a las autoridades mexicanas.
"Venezuela va a exigir que el Gobierno de Ecuador le devuelva a México al exvicepresidente Jorge Glas, se le otorgue el asilo político y regrese a México, para recuperarse físicamente, recuperar su salud y reponerse, que es lo que corresponde de acuerdo a la ley internacional", dijo en su programa televisivo Con Maduro+.
Asimismo, el jefe de Estado venezolano llamó a recordar que, "para resolver este asunto, Ecuador tiene que reponer la situación a su instancia original: otorgar el asilo político y permitir que Jorge Glas sea protegido por México, como lo establece el derecho internacional".
Preparación mexicana
El pasado 12 de abril, la presidencia 'pro tempore' de la Celac, ejercida actualmente por Honduras, informó de la postergación de la cumbre virtual, prevista inicialmente para finales de la semana previa.
Según detallara la presidenta Xiomara Castro de Zelaya en X, el Gobierno mexicano solicitó la reunión en virtud de la "violación de la Convención de Viena de 1961 y la Convención de Asilo de 1954 por parte de Ecuador".
Previamente, la Secretaría de Asuntos Exteriores de México refirió que la canciller mexicana, Alicia Bárcena, y López Obrador habían hablado telefónicamente con Castro "para dialogar sobre la próxima Cumbre Virtual Extraordinaria de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Celac".
Del mismo modo agradeció los buenos oficios de la presidencia 'pro tempore' "para darle la máxima prioridad a que el mecanismo se pronuncie sobre la grave violación al derecho internacional cometida por Ecuador".
La reunión de cancilleres
La crisis México-Ecuador fue abordada la semana pasada en una reunión extraordinaria de cancilleres del bloque suramericano y caribeño, con el norte puesto en conseguir apoyos unánimes contra el asalto a la legación diplomática mexicana en suelo ecuatoriano, así como instar a Ecuador a rectificar su actuación.
Empero, las decisiones en la Celac se toman por consenso y, de momento, la Administración de Daniel Noboa adelantó que no planea disculparse por lo sucedido.
Entretanto, Cuba calificó de "atropello a la soberanía de México" el asalto a la sede diplomática y advirtió que "podría sentar (un) gravísimo precedente y poner en peligro relaciones internacionales y cooperación entre Estados". "Es un hecho grave, inaceptable, que no admite justificación alguna. Defendemos la fuerza del Derecho", afirmó el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla.
Tras esto, las autoridades mexicanas presentaron ante la CIJ una denuncia contra el Estado ecuatoriano que contiene, entre otros puntos, la demanda de expulsión de Ecuador del seno de las Naciones Unidas hasta tanto no emita una disculpa pública.