El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ofrece este viernes una sesión informativa a los medios de comunicación en la que responde preguntas de actualidad sobre la política exterior de Rusia y la agenda internacional actual.
Fin de la hegemonía occidental
En sus declaraciones, el canciller ruso expresó su opinión acerca de las promesas de Occidente de infligir una derrota estratégica a Rusia. De acuerdo con Lavrov, tales afirmaciones demuestran que los países occidentales se encuentran en un estado de "histeria" y "agonía". "Agitar el tema de la derrota de Rusia y subrayar la importancia existencial de esta derrota para el futuro de Occidente refleja agonía e histeria más que un ánimo belicoso", indicó.
De acuerdo con sus palabras, en Occidente temen abiertamente perder su "hegemonía" en el escenario internacional y que una serie de países como Rusia, China, Irán, Corea del Norte y Siria reconstruyan "este mundo". Lavrov destacó que las declaraciones sobre la inminente pérdida de la influencia de Occidente reflejan una comprensión de la formación en curso de un orden mundial nuevo y justo.
"Además de este temor por la pérdida de hegemonía, también están dejando claro con toda franqueza, quizá sin darse cuenta siquiera de ello, que Estados Unidos es quien manda y que todos están por debajo de EE.UU.", añadió.
En este contexto, Lavrov considera que las palabras del ex primer ministro británico Boris Johnson, que dijo que la victoria de Rusia en el conflicto con Ucrania significaría "el fin de la hegemonía occidental", son una confesión abierta ante la Corte Internacional de Justicia sobre la violación del artículo de la Carta de la ONU sobre la igualdad soberana de los Estados. "Creo que la Corte Internacional debería prestar atención a esto", subrayó el canciller.
Especialistas occidentales en Ucrania
Durante la entrevista, Lavrov manifestó que Rusia tiene información de que instructores militares franceses están trabajando en Ucrania. "Hay información de que allí [en Ucrania] trabajan no solo mercenarios franceses, sino también instructores bajo el techo de Francia junto con algunos otros representantes de servicios militares y especiales de países europeos", dijo.
Al mismo tiempo, el ministro recordó que el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, había confesado anteriormente que Occidente "no lucha por Ucrania, sino contra Rusia". "Hay muchas declaraciones como esta", enfatizó.
Sanciones ineficaces contra Rusia
El canciller destacó que, en sus intentos de debilitar a Rusia, Occidente recurre las sanciones. Lavrov señaló que las medidas punitivas están aumentando "de forma completamente irreflexiva, sin siquiera pensar en cuál será el resultado".
"Decidimos no depender de ellos en todas las áreas en las que puedan limitar nuestro desarrollo, y preferiblemente en todas las demás áreas", comunicó el ministro al explicar por qué las sanciones no tienen un peso significativo para Rusia.
Posibles conversaciones con Kiev
Respecto a la posible reanudación de conversaciones con Ucrania para solucionar el conflicto, Lavrov enfatizó que Moscú no descarta esa opción. "Hemos dicho que estamos dispuestos", afirmó el ministro, precisando que Rusia no planea hacer una pausa en su operativo militar durante las negociaciones. "El proceso debe continuar", subrayó.
Lavrov reafirmó que Rusia tiene la plena convicción de que es necesario continuar con la operación militar especial. Asimismo, comunicó que Moscú no confía en las autoridades ucranianas y considera que "las conversaciones con Zelenski son inútiles por muchas razones".
Según el ministro, Occidente teme perder su posición geopolítica. "Borrell dijo que sería muy difícil aceptar una derrota así, la reputación se vería afectada", declaró el canciller ruso.
El fracaso de EE.UU. en Haití
En este contexto, Lavrov mencionó "la conocida" reputación que obtuvo EE.UU. tras su intervención en países como Vietnam, Afganistán, Irak o Siria, de los que ellos mismos "huyeron" o ahora están siendo expulsados. "Si el objetivo era el que decían que era, fracasaron en todos lados", señaló.
Asimismo, en "el pequeño país de Haití, del que han sido responsables durante más de cien años, desde 1918", actualmente reina "el bandidismo". "Tienen justo al lado un país al que prestan gran atención, incluso en el Consejo de Seguridad de la ONU" y "no pueden hacer nada".
Lavrov subrayó que Rusia está arreglando sus asuntos con Ucrania "porque se nos están creando amenazas". "Mientras que para ellos la amenaza es, como mínimo, el tráfico de drogas desde Haití hacia Estados Unidos", remarcó.
"Irán no quiere una escalada"
Lavrov también se pronunció sobre los recientes informes del ataque con misiles israelíes contra Irán. En su opinión, esta acción tiene objetivo " desviar la atención de la comunidad mundial" de la situación en Gaza, donde actualmente transcurre "una catástrofe humanitaria", y muchos expertos aseguran que se trata de un "genocidio".
El fin es que todos los ojos estén puestos en Irán como "una amenaza nuclear". No obstante, la República Islámica "no tiene armas nucleares, así lo ha declarado el OIEA [Organismo Internacional de Energía Atómica]", precisó.
"[Irán] no puede no responder a una violación flagrante del derecho internacional y del estatus de la misión diplomática, pero no quiere una escalada. Y así es exactamente como todos los expertos consideraron la respuesta real de Irán", comentó Lavrov.