El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro calificó de "mito de la libertad" al multimillonario propietario de X, Elon Musk, quien desencadenó recientemente una polémica en ese país al cuestionar el proceder de la Corte Suprema.
"Ahora se acusa al hombre más rico del mundo, dueño de una plataforma cuyo objetivo es hacer libre al mundo entero, que es X, nuestro viejo Twitter", dijo en un multitudinario acto el domingo en la popular playa de Copacabana, en Río de Janeiro.
Bolsonaro consideró que Musk "preserva la libertad" y "tuvo el coraje de mostrar con todas las pruebas hacia dónde se dirigía nuestra democracia".
Musk llegó a amenazar con no acatar las restricciones impuestas en su plataforma y, en respuesta, el juez estrella de la Corte Suprema, Alexandre De Moraes, le incluyó en una investigación sobre propagación de noticias falsas y le abrió otra por obstrucción a la Justicia.
El magistrado es un enemigo abierto de Bolsonaro y está a cargo de varios procesos que corren contra él, entre ellos, uno por su supuesta vinculación con el intento de golpe contra Luiz Inácio Lula da Silva, en una feroz arremetida contra las sedes de los tres poderes en Brasilia el 8 de enero de 2023.
"Huérfanos con padres vivos"
Durante el acto del domingo, el ultraderechista cargó contra el líder de izquierda. "Trajeron de vuelta a la escena del crimen al mayor ladrón de la historia de Brasil. Un partidario de las dictaduras. Lo que quieren es dictadura, con control social de los medios", aseveró Bolsonaro, conocido por su defensa del régimen militar (1964-1985).
El expresidente también negó la existencia de un proyecto de golpe de Estado para interferir en los resultados de las elecciones de 2022, como consta en un documento encontrado por la Policía, y volvió a defender a los detenidos del 8 de enero en Brasilia.
"Tenemos huérfanos en Brasil con padres vivos (...) Nadie intentó tomar el poder en Brasilia con armas. Esa gente tenía la bandera verde y amarilla en la espalda y muchos tenían una Biblia bajo el brazo. No quiero condenar a un número absurdo de personas, porque algunos que cometieron el error de invadir y vandalizar propiedades, como si fueran terroristas, como si fueran golpistas", sentenció.
Sin embargo, en el acto, Bolsonaro no mencionó la controversia que generó su estadía en la Embajada de Hungría en Brasilia, justo después de que las autoridades retuvieran su pasaporte por su presunta participación en la intentona golpista.
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