Los ladrillos del recién desmantelado monumento homenaje de las víctimas de los atentados terroristas yihadistas del 11 de marzo de 2004 en Madrid están a la venta en internet.
Según informa elDiario.es, miembros de la Asociación 11M Afectados del Terrorismo descubrieron el pasado fin de semana que los ladrillos se ofrecen por internet hasta por 200 euros (unos 213 dólares). Eulogio Paz, presidente de la asociación, detalló que en alguno de los anuncios incluso se da la opción de negociar el precio si se compra más de uno. Otros también ofrecen sus servicios para limpiar las piezas por 40 euros (unos 42 dólares).
La ciudadanía madrileña vivió con polémica la desaparición del monumento que se encontraba en la céntrica plaza de Atocha de Madrid, donde está la estación ferroviaria en la que tuvieron lugar varios de los ataques.
El monumento era un cilindro de vidrio de 11 metros de altura, 9,5 metros de diámetro y 160 toneladas de peso, compuesto por cerca de 12.000 ladrillos de cristal. Se inauguró en 2007, tres años después de la tragedia que dejó 193 muertos y más de 2.000 heridos.
Hace caso un año, el Ayuntamiento de la capital española comenzó su desmantelamiento con motivo de las obras en la línea 11 de metro. Ahora se sabe que el plan no contemplaba ni su reubicación ni su conservación.
Se exigen responsabilidades
El 13 de abril, el municipio regaló las piezas de estos ladrillos vidrio a los ciudadanos que los solicitasen. Cada fragmento tiene un peso aproximado de 8,5 kilos.
Paz explicó que la asociación pidió al Consistorio que "hicieran una especie de contrato en el que especificasen a los receptores que no eran elementos destinados a la comercialización". Algo que no ha ocurrido.
"Este es el resultado de cómo una decisión unilateral ha desembocado en que se termine haciendo negocio con la memoria de la gente", denunció. Los familiares de las víctimas y afectados por el atentado exigen responsabilidades al Ayuntamiento.
Se da la circunstancia de que tanto el Ayuntamiento de Madrid como el Gobierno regional de la Comunidad de Madrid se encuentran desde hace décadas encabezados por el conservador Partido Popular (PP), que protagonizó un oscuro episodio en la historia de España cuando tuvieron lugar los atentados.
Los ataques se produjeron tres días antes de las elecciones generales y durante esas tres jornadas el Gobierno de España del presidente José María Aznar, del PP, sostuvo que el autor de los atentados había sido la banda terrorista vasca ETA, considerando el cálculo electoral de que esa hipótesis le era beneficiosa de cara a los comicios.