Blinken lanza advertencias a Pekín durante su visita a China

El presidente chino evocó ante el secretario estadounidense de Estado tres principios que deben regir las relaciones bilaterales.

Estados Unidos está dispuesto a imponer nuevas sanciones a China si no pone fin al supuesto suministro a Rusia de bienes y de componentes de doble uso que Moscú, supuestamente, habría usado para reforzar su base industrial militar, según lo expresó el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, durante su visita al gigante asiático.

El presidente chino, Xi Jinping, se ha reunido este viernes con Blinken, en Pekín. En su encuentro con el jefe de la diplomacia estadounidense, Xi recordó que este año se cumple el 45.º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Estados Unidos, un periodo que describió como "un plazo de altibajos" en las relaciones bilaterales, del que se han sacado "muchas lecciones importantes".

El mandatario señaló que los dos países deben ser "socios más que rivales", buscar un terreno común, pese a las diferencias, y no "la competencia feroz", al tiempo que deben cumplir su palabra.

Xi evocó tres principios –"respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación en beneficio mutuo"- que no sólo debería ser un resumen de la experiencia pasada, sino también una "guía para el futuro".

Por su parte, el secretario de Estado afirmó en rueda de prensa que el objetivo de su visita consiste en hacer balance del trabajo acordado en ciertas áreas por ambas partes en la cumbre del año pasado entre Xi y el presidente Joe Biden.

Blinken enumeró ciertos sectores en los que se han logrado avances bilaterales, como la lucha contra narcóticos.

"Hemos avanzado en nuestra cooperación sobre el fentanilo, otra droga sintética y 'asesino' número 1 de estadounidenses de entre 18 y 55 años de edad", declaró.

En este campo, mencionó que China está tomando medidas contra algunas compañías fabricantes de precursores, es decir, ingredientes químicos indispensables para la producción de drogas sintéticas; la creación de un grupo de trabajo antidrogas conjunto para cooperar en la elaboración de políticas y la aplicación de leyes, así como a la hora de compartir los conocimientos técnicos en este ámbito.

"Si China no maneja este problema, lo haremos nosotros"

Tras subrayar que "EE.UU. siempre defenderá sus intereses y valores fundamentales", Blinken mencionó las "serias preocupaciones" que suscitan en su país que "China esté proporcionando componentes que están potenciando la guerra de Rusia contra Ucrania".

"China es el suministrador principal de máquinas herramienta, microelectrónicos, nitrocelulosa que es necesaria para fabricar municiones y propulsores de cohetes y otros bienes de doble uso que Moscú está usando para reforzar su base industrial", dijo.

Blinken puntualizó que alimentar la base industrial rusa "no amenaza solo la seguridad ucraniana, sino la de Europa" y que "Pekín no puede alcanzar mejores relaciones con Europa mientras apoya la mayor amenaza a la seguridad europea desde el fin de la Guerra Fría".

"Reforzar la seguridad transatlántica es un interés esencial de EE.UU.", advirtió el jefe de la diplomacia estadounidense, que dijo haber dejado claro a China la posisicón de Washgton sobre esta cuestión en las conversaciones de hoy. "Si China no maneja este problema, lo haremos nosotros", recalcó.

A una pregunta de un periodista sobre las medidas que se tomarían para poner freno a dichas entregas de China a Rusia, el secretario de Estado dijo: "Estamos estudiando las medidas que estamos listos a adoptar si no vemos un cambio".

"EE.UU. ha impuesto ya sanciones a más de 100 entidades chinas, como controles de exportación, etcétera. Y estamos totalmente dispuestos a tomar medidas adicionales, como dejé claro en las reuniones de hoy", afirmó.

"China pone en riesgo la subsistencia y los negocios en todo el mundo"

Blinken también se refirió a las alarmas que crean en su país las "prácticas injustas de comerció" por parte de China y las "consecuencias potenciales de sobrecapacidad industrial para el mercado global y el estadounidense".

En particular, dijo que esto se aprecia en los sectores que impulsan la economía del siglo XXI -paneles solares, vehículos eléctricos y las baterías que los alimentan- en los que "solo China cubre más del 100 % de la demanda global, inundando el mercado, socavando la competencia, poniendo en riesgo la subsistencia y los negocios en todo el mundo".

"Es una película que hemos visto ya y que sabemos cómo termina: que se clausuran negocios y se pierden empleos en EE.UU. El presidente Biden no lo permitirá durante su mandato. Nos aseguraremos de que los trabajadores estadounidenses puedan competir en condiciones de igualdad", acentuó.

Blinken aseguró que las acciones de EE.UU. no buscan frenar el desarrollo chino, ni tampoco desacoplar las economías.

"Queremos que la economía china crezca", dijo antes de subrayar que "lo que importa es la manera de cómo crece".

La reunión entre Xi y Blinken tuvo lugar tras las conversaciones que el alto funcionario estadounidense mantuvo con el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, en la capital china, a donde llegó desde Shanghái.