La Policía de Ohio ha hecho público el video del arresto de Frank Tyson, un hombre afroamericano de 53 años sospechoso de abandonar la escena de un accidente de tránsito, que murió después de decirle varias veces a los agentes que no podía respirar mientras lo inmovilizaban en el suelo, el pasado 18 de abril, informan medios locales.
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El video, de 36 minutos, grabado por las cámaras corporales de los policías de la ciudad de Canton, comienza con un patrullero que encuentra un auto abandonado luego de chocar un poste eléctrico. Una persona que pasa por allí le dice al uniformado que el conductor del vehículo se ha ido a un bar cercano.
"Están intentando matarme"
Los agentes entran en el establecimiento y encuentran a Tyson en la barra, e inmediatamente se produce un altercado. "Están intentando matarme" y "llamen al 'sheriff'", repite en varias ocasiones.
Ante la resistencia de Tyson, los oficiales lo tiran al suelo y lo esposan. Se puede ver cómo uno de ellos le pone la rodilla en la espalda, cerca del cuello, durante unos 30 segundos mientras Tyson le dice: "estás en mi cuello" y le repite al menos cinco veces "no puedo respirar". El policía simplemente le responde: "Estás bien". Y le pide que se calme.
A continuación, el video muestra a Tyson en el suelo bocabajo inmóvil durante alrededor de 6 minutos, mientras los agentes hablan y bromean con las demás personas que se encontraban en el bar. Finalmente, uno de los policías pregunta si Tyson se calmó, a lo que otro responde que tal vez se haya desmayado, así que el primero le pide que revise su respiración.
Tres minutos después, se dan cuenta de que algo no está bien con Tyson, por lo que le quitan las esposas y empiezan a practicarle reanimación cardiopulmonar por más de 7 minutos hasta que llegan los paramédicos al lugar y se lo llevan en una ambulancia.
Tyson fue trasladado a un hospital local, donde cerca de una hora después lo declararon muerto. El Departamento de Policía identificó a los agentes como Beau Schoenegge y Camden Burch, informó la WKYC, quienes se encuentran en licencia administrativa desde el jueves mientras se lleva a cabo una investigación.
La muerte de Tyson se asemeja mucho a la del también afroamericano George Floyd a manos de la Policía de Minneapolis en 2020, después de que el agente Derek Chauvin le presionara el cuello con la rodilla durante unos nueve minutos, a pesar de que la víctima le repetía que no podía respirar.