El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ratificó este viernes la ruptura de relaciones con Israel y manifestó que su país no apoya el genocidio ni la "barbarie".
En una publicación en X, el mandatario colombiano escribió que la nación suramericana "no puede estar al lado de un genocidio" y exhortó a que el derecho internacional se preserve "para detener la barbarie".
"Hoy la diplomacia es la expresión del poder económico y militar; la diplomacia debe ser, en cambio, la razón de los pueblos, y su objetivo no debe ser otro que la paz y la vida de la humanidad en toda su diversidad", agregó en su interacción.
Estas afirmaciones las hizo al comentar unas declaraciones del alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, quien defendió a Petro y dijo que había recibido una "descalificación brutal" por criticar al Gobierno hebreo.
El jefe de la diplomacia europea recordó que Tel Aviv había acusado al presidente colombiano de antisemitismo por expresarse en contra de la agresión continuada en la Franja de Gaza y añadió que el calificativo le parecía "fuera de lugar".
El pasado miércoles, el ministro de Exteriores israelí, Israel Katz, calificó a Petro, de "antisemita lleno de odio", luego de que anunciara la determinación de cortar lazos diplomáticos con ese Estado, que entró en vigencia a partir del jueves y que se anunció oficialmente en esta jornada.