Militares rusos destruyeron otro tanque M1A1 Abrams de fabricación estadounidense en la zona de la operación militar especial con un proyectil guiado de artillería Krasnopol, que se valió de las coordenadas proporcionadas por un dron Granat-4.
"El vehículo aéreo no tripulado detectó el tanque en movimiento, lo siguió, emitió la designación del objetivo y lo iluminó", comunicó este domingo el consorcio armamentístico Kalashnikov, que produce los Granat-4. El holding también adjuntó un video del ataque.
Desde su aparición en el campo de batalla en Ucrania, los tanques Abrams se han convertido en un botín deseado para los militares rusos, que ya han destruido varios de estos blindados de un total de 31 suministrados por EE.UU.