El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, pospuso su viaje a Chile programado para el próximo jueves para reunirse con su homólogo, Gabriel Boric, debido a las graves inundaciones registradas en el estado de Rio Grande do Sul, que ya han dejado 145 muertos y 132 desaparecidos.
El estado, ubicado en el sur del país, ha comenzado la semana en alerta ante el volumen de las lluvias, un elevado aumento del nivel de los ríos, riesgos de deslizamientos de tierra y el descenso de las temperaturas. Según GloboNews, el mandatario podría visitar de nuevo esta semana la azotada región, donde 620.000 personas han tenido que abandonar sus hogares, y entre ellas, 82.200 están en albergues provisionales.