El secretario de Culto de Argentina, Francisco Sánchez, ratificó su oposición a las leyes de divorcio, matrimonio igualitario y aborto que se aprobaron en las últimas décadas y que colocaron al país sudamericano a la vanguardia de los derechos civiles en América Latina.
"No solo tenemos que pensar en derogar el aborto, sino en medidas que promuevan la natalidad para que la cuestión demográfica vuelva a ser un eje estratégico para el desarrollo de nuestro país", propuso el funcionario este miércoles en una entrevista radial.
De esta forma, Sánchez ratificó las declaraciones que ofreció el fin de semana durante su participación en la cumbre que el partido ultraderechista Vox realizó en Madrid y que provocaron un escándalo por su nivel de conservadurismo y retroceso histórico en materia de derechos, ya que pide recuperar los "valores" religiosos que España impuso a gran parte del mundo a partir de 1492.
Pese a las críticas, Sánchez no se retractó y, ya de regreso en Buenos Aires, redobló la apuesta y advirtió sobre "las consecuencias graves" que, según él, ha tenido el divorcio en la sociedad argentina.
Por ejemplo, aseguró que el 30 % de los menores que son hijos de familias separadas "sufren trastornos de ansiedad" y rinden un 25 % menos que los "hijos con familias consolidadas", a pesar de que no hay ningún informe que ratifique dichas estadísticas.
El secretario de Culto reconoció que el debate sobre el matrimonio igualitario y el divorcio es complicado porque "la sociedad no está preparada".
Por el contrario, en el caso del aborto reiteró que uno de sus objetivos es echar abajo la ley que se aprobó a fines de 2020.
"Voy a hacer todo lo posible para que la matanza de criaturas en el vientre materno no sea promovida por el Estado. Es una barbaridad absoluta", acusó, a pesar de que la ley ha evitado que miles de mujeres mueran en abortos clandestinos.
Reacciones
Sánchez se quejó por las críticas que recibió en los últimos días y aseguró que quieren limitar su libertad de expresión.
"Muchos periodistas han pedido mi renuncia por dar esta opinión (…) son leyes controversiales y hoy parece que ni siquiera uno se pudiera expresar respecto de esos temas. A tal punto hemos llegado que quien se expresa es cancelado y es atacado como lo he vivido yo en estos días", lamentó.
La polémica llegó al Congreso, en donde la diputada opositora Cecilia Moreau propuso que las bancadas se sumaran a un rechazo y repudio formal a "las expresiones discriminatorias y retrógradas" del secretario de Culto.
"Sabemos que sacó a relucir su conservadurismo mas reaccionario y, escudado en supuestos 'valores tradicionales', retrocedió hasta la Edad Media. Le molesta la felicidad de un pueblo que amplia derechos reconociendo y respetando las diferencias que nos atraviesan a todos. El pueblo argentino no piensa dar ni un paso atrás", advirtió.
Por la noche, el ministro del Interior, Guillermo Francos, aclaró que las posiciones de Sánchez no representan al resto del Gabinete, ni siquiera al partido del presidente Javier Milei.
"Está expresando un posición personal, no de la Libertad Avanza", aseguró en un intento de desligarse de la controversia.