Zelenski dice no importarle que se cuestione su legitimidad
El líder del régimen ucraniano, Vladímir Zelenski, ha afirmado en una entrevista con medios de los países de Asia Central que no le preocupan las declaraciones en torno a su ilegitimidad como jefe de Estado, después de que el 20 de mayo expirara su mandato sin que se hayan celebrado elecciones.
"No me importa mucho, la verdad", señaló, agregando que las declaraciones sobre su ilegitimidad son "aburridas" y "poco interesantes", porque —dijo— "los ucranianos conocen su Constitución".
"Ya no representa a Ucrania"
Mientras, el político opositor ucraniano, presidente del consejo del movimiento Otra Ucrania y doctor en Derecho, Víktor Medvedchuk, denunció que Zelenski llevó al Estado ucraniano al colapso legal al cancelar las elecciones e incurrir en una abierta usurpación del poder, lo que contraviene la Constitución del país. "No se trata de si puede o no, sino de que no tiene derecho a hacerlo", agregó.
Según el político, Zelenski "ya no representa a Ucrania, su firma en los documentos significa exactamente nada, ya que no tiene fuerza legal".
Previamente, Vadim Prystayko, exembajador de Ucrania en el Reino Unido, afirmó a LIGA.net que los socios occidentales de Kiev están preocupados por la expiración del mandato presidencial de Zelenski, porque son conscientes de que, en ausencia de nuevas elecciones, se cuestionará la legitimidad de las autoridades del país.
"La legitimidad del actual jefe de Estado terminó"
Este viernes, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, declaró que Rusia "nunca se ha negado" a las negociaciones de paz para poner fin al conflicto armado en Ucrania, aunque —dijo— estas conversaciones deben basarse en "el sentido común", no en ultimátums, y deben llevarse a cabo con un Gobierno legítimo de Ucrania. "Por supuesto nos damos cuenta de que la legitimidad del actual jefe de Estado terminó", agregó.
El mandato de Zelenski expiró el 20 de mayo, y la legitimidad de su Gobierno ahora está en entredicho. Las elecciones presidenciales en Ucrania debían celebrarse en marzo, tal como lo exige la Constitución, pero el mandatario las suspendió poniendo como argumento la ley marcial y la movilización general decretada en el país por el conflicto militar con Rusia.