El estado de emergencia en Nueva Caledonia expirará la mañana del martes y París no va a prolongar este régimen de seguridad, ha comunicado el Gobierno de Francia.
La medida, vigente en el archipiélago del Pacífico desde hace casi dos semanas por los disturbios, no se renovará para "permitir reuniones de los distintos componentes" independentistas y visitas a los puntos de bloqueo "por parte de representantes electos o funcionarios capaces de pedir su levantamiento", reza el comunicado del Palacio del Elíseo, citado por BFMTV.
Por lo tanto, el estado de emergencia no se extenderá más allá de las 05:00 del martes (hora local).
Al mismo tiempo, el Gobierno informó que "480 gendarmes móviles" reforzarán las fuerzas de seguridad en ese territorio francés "en las próximas horas".
En un intento por apaciguar la situación, el presidente francés Emmanuel Macron visitó Nueva Caledonia el 23 de mayo en medio de un refuerzo de la seguridad y medidas de emergencia.
Tras mantener conversaciones con funcionarios locales y actores económicos en Numea, capital de la región, Macron declaró que no quiere que la polémica reforma del sistema de votación en Nueva Caledonia, propuesta por su Gobierno, se imponga "a la fuerza" y prometió darle al asunto "unas semanas para permitir el apaciguamiento y la reanudación del diálogo con vistas a un acuerdo global".
Las protestas en Nueva Caledonia se deben al controvertido proyecto de ley francés que pretende ampliar el electorado y permitir que las personas de la Francia continental con menos de 10 años de permanencia en el lugar también tengan derecho a voto, que en la actualidad está reservado a los autóctonos y a los residentes de larga data. Los planes del Gobierno de Macron enfurecieron a los partidarios de la independencia de Nueva Caledonia.