El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, reaccionó a los comentarios de un congresista estadounidense frente al retiro del famoso mural del aeropuerto internacional de la capital del país centroamericano, dedicado al monseñor Óscar Arnulfo Romero, el único santo salvadoreño.
Jim McGovern, representante demócrata por Massachusetts, escribió este domingo en la red social X sentirse "profundamente consternado" con la decisión y preocupado por el destino de la obra de arte, la cual se encontraba desde hacía más de una década en uno de los pasillos del área de abordaje. "Espero noticias de las autoridades para saber si seguirá expuesta en un lugar de honor donde los salvadoreños y los visitantes puedan contemplarla fácil y libremente", expresó.
"Se está extralimitando"
Horas después de estos comentarios, Bukele se pronunció en rechazo a la posición injerencista de McGovern, recalcando que se trata del aeropuerto de El Salvador y que cualquier determinación que se tome al respecto no le compete. "Somos una nación soberana y expondremos nuestras obras de arte donde creamos conveniente. Se está extralimitando", afirmó el mandatario en X.
Bukele también precisó que el mural fue trasladado a un lugar "más agradable", a unos metros de donde solía estar. Por otro lado, recomendó al político estadounidense "ocuparse de su propia gente en Massachusetts".
En redes sociales se rumoraba que el mural del artista salvadoreño Rafael Valera había sido borrado, generando reacciones negativas ya que nadie se había pronunciado sobre el destino de la obra. Visitantes del aeropuerto reportaron que en el espacio donde solía estar la pieza fue colocada una valla publicitaria institucional con la frase: "Bienvenidos a la tierra del surf, de los volcanes y del café".
De acuerdo con medios locales, antes de las declaraciones del jefe de Estado, el propio Varela había desmentido la destrucción de su mural, informando que la obra se encontraba en buen estado "en un lugar desconocido dentro de las instalaciones del aeropuerto". Asimismo, expresó su deseo de que fuera reubicada en un lugar "igualmente accesible a la mirada de tantos salvadoreños y extranjeros como lo ha sido durante 14 años". Inaugurada el 24 de marzo de 2010, su pintura fue declarada Bien Cultural por la Secretaría de Cultura de la Presidencia en 2012.