El presidente de Letonia, Edgars Rinkevics, ha instado este lunes a los países occidentales a levantar las restricciones sobre el uso de armas enviadas a Ucrania, afirmando que "no hay motivo" para impedir que el régimen de Kiev ataque el territorio ruso.
En una entrevista para la CNN, el mandatario letón admitió que los avances rusos en la provincia de Járkov son "una consecuencia de nuestra incapacidad para proporcionar armas a Ucrania", así como de los mencionados obstáculos impuestos.
"Este es un momento bastante crítico. Y creo que no hay ninguna razón pragmática racional para no permitir que Ucrania use esas armas contra Rusia de la manera más eficiente", declaró Rinkevics, instando a "reconsiderar su decisión" a aquellos Estados que pusieron trabas en el uso del armamento.
En esa línea, se mostró de acuerdo con las declaraciones previas del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en las que señaló que "ha llegado el momento" de que los miembros se planteen levantar las restricciones.
Los comentarios del líder de la Alianza Atlántica fueron recibidos con duras críticas por parte de algunos de sus integrantes. La primera ministra italiana, Georgia Meloni, le recomendó que tuviera cuidado con sus declaraciones. "No sé por qué Stoltenberg dice algo así", señaló en una entrevista al canal Rai3. "Tenemos que ser muy cautelosos", agregó.
Posible conflicto mundial
Esta misma jornada, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, advirtió a los países de la OTAN de las graves consecuencias que podría conllevar una escalada permanente del conflicto ucraniano.
"Una escalada continua podría acarrear graves consecuencias. Si estas graves consecuencias llegan a Europa, ¿cómo se comportará EE.UU., teniendo en cuenta nuestra paridad estratégica de armamento?", planteó el mandatario. En este contexto, enfatizó que los miembros de la Alianza Atlántica deben "ser conscientes de con qué están jugando".