El ataque de Israel en Rafa, que dejó decenas de civiles muertos, no cruzó una 'línea roja' que pudiera provocar un cambio en la política de Washington hacia Tel Aviv, indicó este martes John Kirby, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
"No queremos ver una gran operación terrestre [en Rafa], no la hemos visto en este momento", declaró el vocero al responder por qué no se consideraba que el ataque israelí en una zona densamente poblada violaba la llamada 'línea roja'.
El funcionario añadió que, tras el ataque israelí, no tiene "cambios de política de los que hablar".
"¿Cuántos cadáveres carbonizados más tendrá que ver el presidente antes de considerar un cambio de política?", preguntó el periodista. "No queremos que se quite una sola vida inocente más", dijo Kirby, antes de comentar que "en cierto modo" se sintió "un poco ofendido por la pregunta".
Los comentarios de Kirby ocurren después de que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) bombardearan con misiles un campamento de refugiados cerca de Rafa, en el sur de la Franja de Gaza, y mataran a decenas de personas inocentes. Tras los ataques se originaron incendios en el campamento de Tel al Sultan y las imágenes de cuerpos calcinados circularon en la Red. Las FDI justificaron su ataque mortal alegando que tenía como blanco una zona controlada por milicianos de Hamás.