Más de 50 grabados de más de 200 años de antigüedad fueron descubiertos en una puerta de madera de un castillo del sudeste de Inglaterra. Uno de los grabados representa a un hombre ahorcado que, se cree, podría representar al emperador francés Napoleón Bonaparte .
La puerta fue hallada recientemente en el castillo de Dover, en la costa suroriental de Gran Bretaña, según un comunicado de la organización English Heritage.
Otros grabados de la puerta, que data de alrededor de la década de 1790, representan la detallada imagen de un velero, la fecha de la Revolución francesa (1789), nueve macabras representaciones de ahorcamientos e innumerables iniciales, revela English Heritage.
La puerta, que originalmente estaba ubicada en el piso superior de la Torre de San Juan, de la época medieval, ha sido cuidadosamente restaurada para ser exhibida al público en julio.
Se cree que las tallas son obra de soldados que vivieron en el castillo entre 1789 y 1855.
Los temores y tensiones que generaron los grabados
En la década de 1790, el castillo fue reconstruido debido a la amenaza de la invasión napoleónica, y "de un antiguo castillo medieval pasó a ser una moderna guarnición militar", reza el comunicado.
Miles de soldados estaban acuartelados dentro de los muros de la fortaleza. En su gran foso exterior, entre seis y doce hombres custodiaban la torre de San Juan, donde se encontró la puerta.
En una época de altas tensiones, pero con muchas "horas que matar", los soldados practicaron sus "dudosos talentos artísticos, tallando más de 50 grafitis en la puerta de la torre con cuchillos o posiblemente bayonetas", sugieren expertos británicos.
"Estos grafitis ofrecen una visión única de las mentes de estos soldados, especialmente durante un período tan tenso", explica Paul Pattison, un historiador de English Heritage.