El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) dio luz verde este viernes a un nuevo préstamo, por 4.000 millones de dólares, para Ecuador, informó la entidad.
El acuerdo se da en el marco del Servicio Ampliado del FMI (SAF), igual que los que los dos últimos convenios firmados en 2019 y 2020, durante la administración de Lenín Moreno (2017-2021), aunque el último fue renegociado en el gobierno de Guillermo Lasso (2021-2023).
El FMI detalla que se trata de un acuerdo por 48 meses, que se había alcanzado a nivel técnico a finales de abril pasado, pero requería la aprobación del Directorio, que es la máxima instancia del organismo multilateral.
Desembolso inmediato
De acuerdo con la entidad internacional, la aprobación por parte del Directorio Ejecutivo permite un desembolso inmediato de 1.000 millones de dólares, "disponibles para el presupuesto público".
De acuerdo con Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI, el acuerdo alcanzado "apoyará los planes de política de las autoridades para fortalecer la sostenibilidad fiscal y proteger a los grupos vulnerables, salvaguardar la dolarización y la estabilidad macroeconómica, reconstruir las reservas de liquidez, mejorar la estabilidad y la integridad financieras y seguir avanzando en el programa de reformas estructurales para promover un crecimiento sostenible e inclusivo".
Según la funcionaria, las autoridades ecuatorianas se han comprometido a "aplicar un ambicioso plan de consolidación fiscal, que contribuirá a mitigar las vulnerabilidades fiscales estructurales de Ecuador y a cimentar la sostenibilidad fiscal a mediano plazo".
Agrega que ese plan "prevé esfuerzos equilibrados tanto por el lado de los ingresos como de los gastos, con una menor dependencia de la evolución del sector petrolero, protegiendo al mismo tiempo el gasto esencial en seguridad, la red de protección social y la inversión pública".
Sostiene que se seguirá trabajando "para mejorar la red de asistencia social, ampliando la cobertura de los programas de asistencia social a las familias necesitadas", lo que ayudará a mitigar el impacto de la consolidación fiscal en estos grupos vulnerables.
Asimismo, indica que el Gobierno de Ecuador prometió seguir reforzando su marco institucional, "mejorando la gobernanza, la transparencia, la gestión de las finanzas gubernamentales y la contratación pública". Esto, detalla, incluirá el avance de las auditorías correspondientes a la empresa petrolera estatal y al gasto en salud, el pago de atrasos y la mejora de las prácticas de gestión de tesorería, así como el progreso de la legislación clave en materia de lucha contra el lavado de dinero y la financiación del terrorismo.
"Un compromiso firme con el programa y una aplicación decidida de las reformas serán fundamentales para su éxito", enfatizó Georgieva.