El Gobierno de Israel en general está de acuerdo con las principales disposiciones del plan que promueve el presidente estadounidense Joe Biden para poner fin a la guerra en la Franja de Gaza, aseguró el domingo Ophir Falk, asesor de política exterior del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, en una entrevista concedida a The Sunday Times.
Según el medio, Falk enfatizó que Tel Aviv no rechaza el plan, al que calificó de "un acuerdo que acordamos no es un buen acuerdo, pero queremos desesperadamente que los rehenes sean liberados, todos ellos".
Asimismo, aclaró que las condiciones de su país "no han cambiado" y siguen siendo las mismas: "la liberación de los rehenes y la destrucción de Hamás como organización terrorista genocida".
En el mismo contexto, el funcionario explicó que "hay muchos detalles que resolver". "Eso incluye que no habrá un alto el fuego permanente hasta que se cumplan todos nuestros objetivos", añadió.
El 31 de mayo, Biden instó al movimiento palestino Hamás a considerar una nueva oferta de Israel sobre un alto al fuego en Gaza, asegurando que el plan propuesto consta de tres fases de desescalada y retirada de tropas israelíes del enclave palestino.
La misma jornada, Hamás anunció que valora positivamente la nueva propuesta israelí. Por su parte, el Gobierno israelí reiteró el deseo de hacer volver a los rehenes lo antes posible y afirmó que Netanyahu ya había autorizado a su equipo negociador a presentar un plan para conseguirlo.