El movimiento de extrema derecha Proud Boys —que en enero de 2021 encabezó el asalto al Capitolio de EE.UU. en un intento fallido de revertir la derrota electoral de Donald Trump— se está recuperando y cobrando fuerza en medio de la campaña de Trump para volver a la Casa Blanca, informa Reuters con referencia a varias fuentes, incluidos ocho miembros del grupo radical.
Después del asalto al Capitolio, cuatro exlíderes del movimiento fueron declarados culpables de conspiración sediciosa y sentenciados a de 15 a 22 años de prisión, mientras que unos 70 miembros de grupo fueron acusados de participar en los actos violentos.
Sin embargo, desde Proud Boys afirmaron a la agencia que se están preparando para actuar una vez más como una "fuerza física" en apoyo de Trump, quien prometió a conceder el indulto a los condenados por el asalto si consigue salir elegido como presidente en noviembre.
¿Es posible un estallido de violencia?
Uno de los miembros de Proud Boy dijo a la agencia que el país se encuentra actualmente viviendo la "calma antes de la tormenta".
Así, recientemente la organización ultraderechista se ha vuelto más visible durante los eventos de campaña de Trump y, en el contexto del reciente veredicto de culpabilidad contra el exmandatario, la rama de Proud Boy en el estado de Ohio prometió "guerra" y divulgó un video de peleas callejeras de sus miembros, acompañado con el mensaje: "peleando se resuelve todo".
Mientras tanto, la rama del movimiento en Miami afirmó que "ahora, más que nunca", está reclutando a nuevos miembros.
A medida que crece la actividad del grupo radical, incluido en los mítines de la campaña de Trump, la sociedad estadounidense se muestra cada vez más preocupada por un posible estallido de violencia en torno a las presidenciales de noviembre, indica la agencia citando datos de encuestas.