El enfrentamiento actual entre Rusia y EE.UU. no se puede comparar con la crisis de los misiles de Cuba de 1962, según ha afirmado Dmitri Peskov, portavoz del presidente ruso.
En declaraciones a RBC, el vocero indicó que en aquel entonces se trataba de un conflicto entre dos sistemas ideológicos estables, mientras que "ahora todo se está resquebrajando por los costados, todo está cambiando, son movimientos de los propios polos".
Peskov afirmó que uno de estos polos, EE.UU., "está perdiendo gradualmente su posición de liderazgo, en parte porque está cortando la rama en la que se sienta".
Mientras, "están creciendo nuevos centros de poder y todo el sistema está en movimiento. Por lo tanto, la esencia de esta crisis es completamente diferente", explicó el vocero, hablando en el marco del Foro Económico Internacional de San Petersburgo (SPIEF-2024).
En un intento por mantener su posición de liderazgo —sostuvo—, EE.UU. no solo intenta "oprimir" a Rusia, sino incluso "deshacerse" del país. "Esto ya es una pelea. Y en este caso ya no se trata de Ucrania. Ucrania es un pequeño instrumento en esta lucha existencial", subrayó el portavoz presidencial.
El miércoles, el presidente ruso, Vladímir Putin, amenazó a los países occidentales con "una respuesta asimétrica" en el contexto de la autorización otorgada a Kiev para usar sus armas de alta precisión contra el territorio ruso. "Si alguien considera probable suministrar este tipo de armas" a Ucrania, "¿por qué no tendríamos el derecho a suministrar nuestras armas de clase semejante a aquellas regiones del mundo donde se realizarían ataques a objetivos sensibles de aquellos países que lo están haciendo hacia Rusia?", acentuó Putin.
- La crisis de los misiles de Cuba fue uno de los episodios más críticos de la Guerra Fría, cuando en octubre de 1962 EE.UU. descubrió que la URSS había trasladado misiles nucleares a Cuba, como respuesta al despliegue de misiles estadounidenses en Turquía. Tras dos semanas de tensión y varios incidentes armados en las proximidades del país caribeño, las partes lograron resolver la crisis mediante negociaciones. Moscú le ofreció a Washington el retiro de los misiles a cambio de que no ataque a Cuba y la eliminación del bloqueo militar impuesto contra la isla. EE.UU. aceptó y también retiró sus misiles balísticos de Turquía.