Petro defiende la decisión de dejar de vender carbón a Israel por la guerra en Gaza
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, defendió este martes la decisión de su Gobierno de dejar de vender carbón a Israel en un intento por presionar a Tel Aviv para que detenga su ofensiva contra la Franja de Gaza.
"Los mismos tratados de la OMC [Organización Mundial del Comercio] determinan que se puede suspender exportaciones a un lugar con serias afectaciones de derechos humanos. Se hizo con Sudáfrica, ¿por qué no donde han asesinado a casi 16.000 niños?", cuestionó en las redes sociales.
Los mismos tratados de la OMC determinan que se puede suspender exportaciones a un lugar con serias afectaciones de derechos humanos. Se hizo con Sudáfrica, ¿por qué no donde han asesinado casi 16.000 niños?¿Los dueños de las carboneras que exportan acaso son nacionales… https://t.co/R9HD10Jxbx
— Gustavo Petro (@petrogustavo) June 11, 2024
Y continuó: "¿Los dueños de las carboneras que exportan acaso son nacionales colombianos? ¿No tienen compromisos éticos en sus propios países? ¿Qué opina Glencore [multinacional que opera en el país andino]? ¿Qué opina la ciudadanía suiza?".
Con este mensaje, Petro respondió a las críticas de Carlos Andrés Cante, presidente ejecutivo de la Federación Nacional de Productores de Carbón (Fenalcarbón), a la medida adoptada por el Gobierno colombiano.
"Hemos estado analizando precisamente esa situación y, claramente, más que una medida en contra de Israel, es una medida contra el carbón colombiano", declaró Cante en una entrevista en La FM.
Principal proveedor de carbón a Israel
"Estamos hablando de un poco más de tres millones de toneladas de carbones térmicos, principalmente en Cesar y La Guajira, que se exportaron el año pasado a Israel, un mercado que hemos venido construyendo desde hace más de 30 años", dijo.
Colombia es el mayor proveedor de carbón a Israel, al que vendió el año pasado 450 millones de dólares de este combustible fósil.
En mayo, el Gobierno colombiano anunció la ruptura de las relaciones diplomáticas con Israel, en rechazo a los ataques de Tel Aviv contra la población palestina, e instó a la Corte Penal Internacional (CPI) a emitir una orden de detención contra Benjamín Netanyahu.