Los países de la OTAN se verán obligados a suministrar armas a Ucrania, y será coordinado por las estructuras de mando de la Alianza, declaró el secretario general, Jens Stoltenberg, en una rueda de prensa celebrada este miércoles en Bruselas.
El funcionario recordó que EE.UU. tardó seis meses en acordar una ayuda adicional a Ucrania y que no todos los países de la OTAN cumplieron sus promesas de suministrar armas. "Y si convertimos esto no en contribuciones voluntarias, sino en compromisos de la OTAN, por supuesto que será más sólido, más fiable", dijo. Asimismo, destacó que "será un esfuerzo conjunto de los aliados de la OTAN".
"Y creo que este es un ejemplo de cómo, utilizando a la OTAN, podemos tener un marco más sólido y predecible, y especialmente combinado con el compromiso de gastar al menos 40.000 millones de euros al año", añadió. Según él, la medida proporcionaría un apoyo "más previsible" al régimen de Kiev, así como "más responsabilidad, y también un reparto equitativo de la carga".
Por su parte, la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, calificó esta decisión como un intento de Washington de involucrar a Europa en un enfrentamiento directo contra Moscú, bajo la bandera de la OTAN.