Elon Musk, el director ejecutivo de SpaceX, habría creado un ambiente bastante incomodo para las empleadas de su empresa, llegando a proponerle en varias ocasiones a una de ellas tener juntos un bebé, informó The Wall Street Journal este miércoles.
El periódico cita mensajes de texto y correos electrónicos, así como otros documentos y entrevistas con más de 48 personas, incluidos amigos y familiares de las mujeres, así como exempleados.
Relaciones con una becaria
De acuerdo con el informe, el magnate habría mantenido una relación sexual con una becaria que era por entonces 20 años más joven que él, que luego pasó a formar parte del equipo ejecutivo de la compañía. Su relación habría empezado a principios de la década de 2010, cuando la mujer –cuyo nombre, al igual que de las otras empleadas, no fue proporcionado– aún iba a la universidad, y terminó poco después que ella se graduara.
En 2017 la mujer fue contratada por SpaceX, y se reporta que Musk habría intentado reiniciar la relación. La trabajadora dejó la empresa en 2019 y negó haber estado con el multimillonario mientras trabajó allí.
Tener bebés para Musk
Asimismo, el empresario le habría insistido reiteradamente a una empleada de su compañía aeroespacial que tuviera bebés con él. De acuerdo con personas próximas a esa circunstancia, la trabajadora dejó la empresa en 2013 y posteriormente acusó a Musk de tales acosos.
El artículo señala que ella se negó a aceptar la extraña propuesta del magnate, hecho que provocó que su relación laboral se deteriorara. Según las fuentes, tal actitud condujo a que Musk le negara un aumento de sueldo.
En aquel entonces, el multimillonario, que tiene al menos 10 hijos, sostenía que el mundo enfrentaba una crisis de subpoblación y que las personas con alto coeficiente intelectual deberían procrear más, indica el periódico.
Sexo de un mes
El informe afirma que Musk manifestó hacia varias de sus trabajadoras "una cantidad inusual de atenciones o las perseguía". Una de ellas reveló que en 2014 mantuvo por un mes una relación sexual con el multimillonario. Sin embargo, la historia terminó mal y la mujer se vio obligada a dejar la empresa, como también a firmar un acuerdo que le prohibía hablar de su trabajo para Musk.
De igual manera, otra empleada de SpaceX habría recibido repetidas invitaciones del magante para ir a su casa por la noche, según mensajes de texto citados por el medio.
Un caballo a cambio de servicios eróticos
Musk ya se había visto envuelto en acusaciones de conducta sexual inapropiada en 2016, cuando una auxiliar de vuelo alegó que durante un viaje en un avión privado de SpaceX, Musk actuó de manera incorrecta y le pidió "un masaje de cuerpo entero".
Según la azafata, el empresario "expuso sus genitales" y luego "la tocó y se ofreció a comprarle un caballo si ella 'hacía más', en referencia a la realización de actos sexuales". La aeromoza le habría dicho a una amiga que después de rechazar la indeseada demanda empezó a ser contratada con menos frecuencia para el avión de SpaceX.
Acusaciones falsas
Por su parte, la presidenta de SpaceX, Gwynne Shotwell, salió en defensa del empresario y tachó de falsas tales acusaciones. "Las falsedades, las caracterizaciones erróneas y la historia revisionista de su correo electrónico pintan una narrativa completamente engañosa", sostuvo.
"Sigo asombrada por lo que este extraordinario grupo de personas está logrando cada día, incluso en medio de todas las fuerzas que actúan en nuestra contra. Y Elon es uno de los mejores humanos que conozco", aseguró.
En 2022, Shotwell ya había hecho declaraciones similares. "He trabajado estrechamente con él durante 20 años y nunca ha visto ni oído nada que se parezca a estas acusaciones", aseguró entonces.