El jueves pasado, a las tres de la tarde, Loan Danilo Peña, un niño de cinco años, salió de la casa de su abuela junto con unos primos y tres adultos para buscar naranjas en el campo. Pero él fue el único que nunca volvió.
La desaparición ocurrió en Corrientes, una provincia ubicada al noreste de Argentina, y provocó conmoción en el país, que ha ido escalando con el paso de los días.
El lunes, en la zona en la que el menor se perdió, se llevó a cabo un operativo donde participaron alrededor de 600 policías, bomberos y miembros de otras fuerzas de seguridad.
Luego de varias horas de rastrillaje, el subdirector de Defensa Civil, Bruno Lovinson, confirmó el hallazgo de huellas humanas pequeñas.
"Podría ser él", señaló el funcionario al garantizar que no van a cesar la búsqueda hasta dar con el niño. El domingo ya habían encontrado uno de sus zapatos.
Mientras tanto, ante la posibilidad de que el menor esté perdido en el monte, los rescatistas colocaron dulces y agua en diferentes puntos con la esperanza de que pueda hidratarse.
"Para Loan. No tocar", señalan los letreros con la intención de hacerle saber que lo están buscando.
Algo no cierra
Múltiples dudas rodean el caso, ya que Loan no salió solo.
Lo hizo acompañado de uno de sus tíos y dos amigos de este. Los tres son mayores de edad y están detenidos, acusados de abandono de persona, porque fueron quienes lo sacaron de la casa de su abuela y las últimas personas en verlo.
Junto con ellos también iban otros menores, que son primos de Loan. El plan era recoger naranjas, pero, de acuerdo con las versiones de los acusados y de los niños, en algún momento Loan tomó otro rumbo en el monte, lo perdieron de vista y no lo encontraron más.
El problema es que los tres adultos se llevaron a Loan sin el permiso de su papá, lo que se consideró un agravante al momento de dictarles la prisión preventiva.
"Ellos vinieron a almorzar porque conocen a mi madre. Siempre vienen, pero yo vengo cada 15 días o un mes. Empezamos a buscar [a Loan] y vine directo para acá [adonde se perdió]. Ellos no me dijeron nada. ¿Cómo van a llevar a la criatura ahí? ¿Por qué no piden permiso?", reclamó el padre en declaraciones que consignó el diario Tiempo Argentino.
"No tengo explicación. Acá no pasa nadie, no hay autos ni camionetas […], algo no me está cerrando", agregó.
Mientras siguen los operativos en el monte, el Sistema Federal de Búsqueda de Personas Extraviadas y Desaparecidas del Ministerio de Seguridad anunció una recompensa de cinco millones de pesos (alrededor de 550.000 dólares) para las personas que aporten datos certeros sobre su paradero.