El presidente de Francia, Emmanuel Macron, cree que varios grupos políticos con ideas opuestas podrían gobernar juntos para impedir que aquellos que están en los "extremos" lleguen al poder, informa la agencia Bloomberg citando al mandatario.
"Hay muchos hombres y mujeres que tendrán que gobernar juntos, sean cuales sean sus diferencias, pero hay extremos que no deben pasar", dijo Macron el viernes en un concierto en el Palacio del Elíseo. Estas declaraciones serían una señal de cómo el presidente prevé "manejar la situación para mantener cierto grado de control sobre el Gobierno" después de las elecciones parlamentarias extraordinarias del 30 de junio y el 7 de julio, que prometen ser muy desfavorables para la coalición gobernante Ensemble ('Juntos', en español), señala la agencia.
"La ecuación es desafiante, ya que la centroizquierda, con la que el partido del presidente podría haber encontrado puntos en común en algunas políticas, ahora es parte de una alianza que incluye partidos de extrema izquierda que él repudia", explica Bloomberg en su análisis publicado el sábado. Además, hay señales de ruptura incluso dentro de la coalición de Macron.
Hollande 'sepulta' al macronismo
A su vez, medios galos recogen la opinión del expresidente de Francia François Hollande quien volvió súbitamente al escenario político tras la decisión de Macron de disolver la Asamblea Nacional. El líder socialista hace campaña para la coalición de centroizquierda Nuevo Frente Popular, recién instituida el 10 de junio.
"El macronismo se acabó", declaró el político. "Lo que en un momento dado pudo representar se acabó", sentenció. Hollande, de 69 años, no tiene "cuentas por saldar" con su exministro Macron, pero regresa al departamento francés de Corrèze buscando arrebatarle un escaño parlamentario a Los Republicanos y asegurarse de que no caiga en manos de la Agrupación Nacional de Marine Le Pen. El impopular macronismo fue expulsado de la respectiva circunscripción ya en 2022 y el escepticismo del expresidente sobre sus perspectivas deja pocas oportunidades para una alianza.
Hollande cita el riesgo de que la extrema derecha llegue mañana al poder, "o muy cerca del poder". Otro riesgo, según sus palabras, es "el de inestabilidad", porque duda que surja una mayoría al día siguiente de los comicios.
El exmandatario es actualmente la cuarta figura política mejor aceptada por los franceses, según sondeos.
¿Mayoría absoluta para Le Pen?
Mientras tanto, una reciente encuesta realizada por la empresa de opinión pública Elabe muestra que la Agrupación Nacional ganaría el liderazgo en la primera vuelta de las elecciones legislativas el próximo 30 de junio, con un 36 % de intención de voto. Este resultado le permitiría enviar entre 250 y 280 diputados a la Asamblea Nacional, mientras que se requieren de 289 escaños para la mayoría absoluta en la cámara.
El Nuevo Frente Popular obtendría un 27 %, el movimiento de Macron un 20 % y Los Republicanos un 10 %. El guion que describe BFMTV requeriría que Emmanuel Macron "conviviera, en teoría, con el líder del partido político que quedó primero en las elecciones legislativas".