La Oficina del sheriff del condado de Bay, en Florida (EE.UU.), comunicó este lunes la muerte de Debbie Szymanski, una residente de St. Louis que visitaba la playa Panama City, en la costa del golfo de México. La mujer de 60 años falleció mientras nadaba en el mar el domingo.
Dos días antes, las autoridades habían anunciado el deceso de otros tres jóvenes que pasaban sus vacaciones en la misma playa. Se trata de Harold Denzel Hunter, de 25 años, Jemonda Ray y Marius Richardson, ambos de 24, un grupo de amigos que decidieron nadar en el mar cerca del anochecer el pasado viernes y se ahogaron al ser arrastrados por una corriente de resaca.
"Los actos de valentía de los socorristas fueron asombrosos", comentó el sheriff, Tommy Ford, en un comunicado. "Muchos de nuestros salvavidas de la Oficina del sheriff, los Servicios de Emergencia del condado de Bay y la playa Panama City se adentraron en las aguas oscuras y peligrosas durante más de dos horas para intentar rescatar y buscar a los jóvenes. Me preocupa el costo emocional que estas situaciones suponen para los socorristas", añadió.
Mientras, Ryker Milton, un residente de Oklahoma de 19 años, murió el jueves por la noche en las mismas circunstancias, recoge el medio local Panama City News Herald. El joven fue la primera víctima de las cinco reportadas hasta el momento.
Corrientes de resaca
El diario señala que las corrientes de resaca son poderosos flujos de agua que se alejan rápidamente de la orilla. Se forman con mayor frecuencia en puntos bajos o roturas en los banco de arena y cerca de estructuras como embarcaderos y muelles.
También explica que se originan cuando las olas entrantes crean un banco de arena submarino. Luego, las olas empujan más agua entre el banco de arena y la orilla hasta que este colapsa y el agua regresa al mar en un enérgico torrente a través de un estrecho espacio. La publicación alerta que puede ser difícil identificarlos al estar en el mar, ya que el agua sobre ellos puede estar en calma.
Señales de alerta
La oficina del Sheriff y otros funcionarios han advertido repetidamente a la gente que no ingrese a la zona si se colocan banderas rojas. "Por favor, manténgase fuera del agua", publicó el domingo. "El agua puede parecer tranquila, pero hoy las corrientes subyacentes son traicioneras. Es demasiado peligroso nadar ahora", avisaron en las redes.
Las cinco víctimas mortales estaban nadando a pesar de que se habían colocado banderas rojas dobles o simples en la playa. Las primeras indican "condiciones extremadamente peligrosas" y que nadie debe ingresar al mar. Mientras las segundas señalan "condiciones de alto peligro con mucho oleaje y/o corrientes", precisaron las autoridades.