Exempleados del Foro Económico Mundial denunciaron discriminación de género y racial en la organización y señalaron que se habían producido muchos casos de acoso sexual al personal femenino, informa The Wall Street Journal.
El medio estadounidense reporta casos de violación de las normas de conducta laboral por parte de la dirección del Foro, incluido su fundador y máximo responsable, Klaus Schwab, así como diversos casos de discriminación dentro de la organización, cuyo objetivo es mejorar el mundo, en general, y erradicar la discriminación de género y racial, en particular. Decenas de antiguos y actuales empleados han descrito estas situaciones, y también han salido a la luz violaciones de la legislación laboral a través de denuncias internas y correos electrónicos.
Discriminación a mujeres embarazadas y madres jóvenes
Según los informes, al menos seis empleadas del Foro sufrieron discriminación después o durante sus embarazos, siendo degradadas en sus cargos o despedidas. Por ejemplo, en el 2017, una mujer aceptó un trabajo para liderar una iniciativa para 'startups', pero descubrió que estaba embarazada y se lo comunicó directamente a Schwab, que a su vez le dijo que no podría trabajar al mismo ritmo y que no era apta para su puesto. Como consecuencia, fue despedida.
Al mismo tiempo, las empleadas señalaron que la organización, que ha publicado varios artículos subrayando la importancia de apoyar a las madres jóvenes trabajadoras, las discrimina. Por ejemplo, una mujer tras su baja por maternidad denunció haber tenido que enfrentarse a comentarios despectivos de Jeremy Jurgens, director del Foro. Asimismo, a Topaz Smith, empleada de la oficina de Nueva York, le dijeron tras regresar de su baja por maternidad que su puesto había sido suprimido y que le darían un trabajo temporal de 6 meses, y pronto contrataron a una nueva persona para ocupar su antiguo puesto.
Sexualización de las empleadas
Además, muchas mujeres sufrieron tanto sexualización como acoso por parte de altos directivos e invitados de alto rango en el Foro anual en Davos. Por ejemplo, tres mujeres que trabajaron estrechamente con Schwab en Ginebra denunciaron que este les hacía comentarios ambiguos, y a una de ellas la invitaba constantemente a un restaurante o a una exposición, a lo que ella respondía que solo quería una "relación profesional". Sin embargo, en respuesta a las acusaciones, los representantes del Foro afirmaron que Schwab nunca acosaba a las empleadas y que las acusaciones de las mujeres eran vagas y falsas.
Varios miembros del personal también se han quejado de acoso sexual en el Foro de Davos, señalando que los contactos sexuales entre asistentes VIP del evento y empleados de la organización incluso tenían un nombre especial de 'Acción Blanco sobre Azul'. Se reporta que, durante el evento, siempre se pedía a las empleadas que "tuvieran buen aspecto y llevaran vestidos ajustados". Una mujer que trabajaba para la organización en la década del 2010 contó cómo un director general le preguntó si quería volver a su habitación y tomar con él un whisky japonés especial.
Además, también se han producido situaciones similares en horario laboral. Por ejemplo, en el 2018, Justyna Swiatkowska denunció que el gerente del Foro, George Karam, la invitó a tomar algo después del trabajo y hubo tocamientos no deseados y besos forzados. Otras mujeres también se quejaron de Karam, pero la organización no hizo nada al respecto durante casi 3 años. El gerente fue despedido posteriormente, pero fue contratado en la empresa asociada al Foro.
Discriminación racial
Los empleados afroamericanos también eran vulnerables, y se quejaban de que no se les había tenido en cuenta para promociones o se les había excluido de viajar a Davos. Hubo también dos casos de altos directivos que utilizaron la palabra "negro" delante de empleados afroamericanos.
Al menos seis empleados afroamericanos afirmaron haber perdido promociones o que se les habían arrebatado de repente mejores oportunidades. Además, Kimberly Bennett, una empleada afroamericana, expresó este año su preocupación por el hecho de que solo fueran al Foro "empleados blancos de Europa".
La respuesta del Foro
El Foro rechazó las acusaciones de mal ambiente laboral e incidentes de discriminación. El artículo del medio estadounidense "describe erróneamente nuestra organización, cultura y colegas, incluido nuestro fundador", declaró el vocero, Yann Zopf. Negó los casos descritos en el artículo, y también señaló que el Foro "no tolera el acoso ni la discriminación y ha respondido adecuadamente a todas las quejas recibidas".