La Comisión Europea ha acusado a Meta* de incumplir su nueva Ley de mercados digitales en materia de la competencia, que entró en vigor en marzo, por imponer a los usuarios de Facebook e Instagram el modelo de 'pago o consentimiento' para forzarlos a autorizar el uso de sus datos personales para mostrarles publicidad.
Desde pasado noviembre, Meta da a los usuarios europeos la opción de pagar por utilizar sus redes sin anuncios basados en sus datos personales para cumplir con las normas locales de privacidad de datos. Quienes acceden desde la computadora, pueden pagar unos 10,70 dólares al mes, mientras que en las 'apps' de móviles, el pago se eleva a unos 13,90 dólares.
Las autoridades europeas consideraron que este esquema viola el artículo 5 del apartado 2 de la legislación, que ordena buscar el consentimiento de los usuarios para combinar sus datos personales entre los servicios de la plataforma y terceros. Si los usuarios deniegan dicho consentimiento, deben tener acceso a una alternativa menos personalizada pero equivalente, y al mismo tiempo el uso de la plataforma o de determinadas funciones no puede ser condicionado por su consentimiento.
En un comunicado publicado este lunes, la Comisión Europea dictaminó que Meta "no cumple con los requisitos necesarios establecidos" en el citado artículo. "En particular, el modelo de Meta no permite a los usuarios optar por un servicio que utilice menos datos personales suyos pero que, por lo demás, sea equivalente al servicio basado en 'anuncios personalizados'", razonó.
Otra violación de la norma legislativa radica en no permitir a los usuarios "ejercer su derecho a consentir libremente la combinación de sus datos personales", agregaron las autoridades europeas.
"Para garantizar el cumplimiento de la Ley de mercados digitales, los usuarios que no den su consentimiento deben tener acceso a un servicio equivalente que utilice menos datos personales suyos, en este caso para la personalización de la publicidad", aclaró la Comisión Europea.
*Calificada en Rusia como organización extremista, cuyas redes sociales están prohibidas en su territorio.