El presidente de Colombia, Gustavo Petro, reconoció las críticas que recibió de la ciudadanía durante un evento en la Cámara de Comercio de Bogotá el viernes, y admitió que su administración no ha trabajado a la velocidad que se requiere ni ha alcanzado los avances esperados.
"Una de ellas nos dijo: 'Mucho tilín tilín y nada de paletas'", comentó el mandatario refiriéndose a una de las mujeres que participó en el evento, haciendo énfasis en la falta de ejecución de los proyectos. Petro les dio la razón a las críticas y reprendió a los funcionarios por no tomarse en serio su trabajo.
"Pues es cierto, porque el funcionariado del Gobierno nacional no entiende ni jota de lo que estamos hablando aquí e incluso los más altos funcionarios. Esta vaina como que les resbala, porque se vuelve difícil, porque hacer cambios es difícil", aseveró y añadió que realizar cambios para ciertos funcionarios representaba un riesgo.
Petro aseguró que entiende que la labor pública es difícil, y muchas veces se debe lidiar con una presión que muy pocos soportan, por lo que hizo un llamado a sus funcionarios para que el que no tenga la capacidad de afrontar el ritmo de trabajo se aparte del cargo, para que alguien más "asuma la pelea".
En este sentido, el presidente latinoamericano comparó algunos cargos públicos con "puestos de combate", calificándolos de "puestos rojos", ya que "el peligro no es simplemente que le monten a uno un proceso, sino que le pueden meter a uno un tiro", insistió.
"La gente que tiene que tomar decisiones se paraliza y se queda quieta y dice: '¿Este presidente por qué no se calma un ratico?', pero yo no me puedo calmar porque me quedan dos años, me toca acelerar. Entonces les voy diciendo: 'Si no aguantan, den un paso al costado, porque eso no es un pecado'. Nadie nació para todas estas vainas. Yo que tengo el cuero duro, entonces, resisto", señaló.