El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, lanzó el sábado una dura advertencia contra Israel, en medio del aumento de las tensiones en la región de Oriente Medio.
En un discurso ante el gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, en turco), el mandatario habló sobre la importancia del desarrollo de la industria de la defensa local para persuadir a Israel en sus ataques a la Franja de Gaza.
"Debemos ser muy fuertes para que Israel no pueda hacer estas cosas a Palestina", afirmó, citado por los medios locales, desde la provincia de Rize, en el noreste del país. "Al igual que entramos en [Nagorno] Karabaj y Libia, haremos lo mismo con ellos", continuó.
"No hay nada que nos impida hacerlo. Solo tenemos que ser lo suficientemente fuertes para dar estos pasos", concluyó el mandatario turco.
A mediados de mayo, Erdogan ya había advertido que, si no se detienen los ataques de Israel a Gaza, este "podría apuntar a la región turca de Anatolia". "No esperen que Israel se detenga en Gaza. Si no se le detiene, este Estado feroz y terrorista llegaría a tener planes para Anatolia, con su delirio de la tierra prometida", manifestó en aquel momento.
Clima de tensión
En tanto, este sábado, un campo de fútbol en la localidad de Majdal Shams, en los Altos del Golán ocupados por el país hebreo, fue objeto de un ataque con cohetes que dejó varios muertos. Como respuesta, aviones militares israelíes atacaron tres ciudades libanesas en un intento de "asestar un duro golpe a Hezbolá".
A su vez, integrantes de Hezbolá comunicaron a la ONU que el mortífero incidente fue resultado del impacto de un interceptor antimisiles israelí en un campo de fútbol, una acusación que Israel negó. El ministro de Asuntos Exteriores del país hebreo, Israel Katz, destacó que "no hay ninguna duda de que Hezbolá ha cruzado todas las líneas rojas".