Irán podría llevar a cabo este lunes su ataque de represalia contra Israel, en respuesta al asesinato del líder político de Hamás, Ismaíl Haniya, informó este sábado Axios, que cita a tres funcionarios de EE.UU. y del país hebreo.
Paralelamente, se reporta que el general Michael Erik Kurilla, comandante del Mando Central de las Fuerzas Armadas de EE.UU. (CENTCOM, por sus siglas en inglés) llegó a Oriente Medio este sábado, mientras Tel Aviv se prepara para un eventual ataque reforzando su sistema de seguridad.
Otras fechas
Previamente, Sky News Arabia, que citaba fuentes de la inteligencia occidental, informó que el posible ataque iraní podría tener lugar el 12 o el 13 de agosto, cuando en el país hebreo se conmemora el "día más triste del calendario judío", el llamado Tishá B'av, que recuerda, entre otras cosas, la destrucción del Primer y del Segundo Templo de Jerusalén.
Se enfatiza que Hezbolá también puede unirse a los ataques, ya que prometió vengarse por el asesinato de uno de los principales comandantes del movimiento chií libanés, Fuad Shukr.
¿Por qué una fiesta religiosa?
Según los informantes, la elección de esta fecha concreta podría deberse a una serie de factores, entre ellos el aspecto simbólico y emocional. Según el medio, el posible ataque en esta fiesta religiosa, que conmemora acontecimientos trágicos de la historia del pueblo hebreo, maximizaría el impacto emocional y psicológico, reforzando los sentimientos de vulnerabilidad y miedo en la sociedad israelí.
Asimismo, fuentes de Sky News Arabia apuntaron que el ataque podría buscar un elemento sorpresa, cuando el foco del sistema de seguridad puede centrarse en la prevención de disturbios, complicando de esa forma la respuesta inmediata israelí y generando más caos.
Otra razón, según la inteligencia occidental, estaría asociada a la supuesta amplia cobertura en los medios de comunicación que representaría el mensaje de Irán y de Hezbolá.