El índice bursátil Nikkei 225 de Japón se desplomó más de un 12% este lunes, provocando la baja en otros mercados asiáticos. Tal situación se produjo tras fuertes ventas provocadas por temores de que la economía estadounidense pudiera estar en peores condiciones de lo esperado.
Esta jornada el Nikkei 225 cayó más de 4.000 puntos, colocándose en 31.458,42 media tarde del lunes en Tokio.
La mayor caída del Nikkei en un solo día fue de 3.836 puntos, o 14,9%, en el día conocido como 'Lunes negro' en octubre de 1987.
La ola de ventas afectó a las principales empresas japonesas. Las acciones de Toyota Motor cayeron un 11% y las de Honda Motor un 13,4%. El fabricante de chips informáticos Tokyo Electron se desplomó un 15,8% y Mitsubishi UFJ Financial Group un 18,4%.
Los inversores extranjeros están vendiendo acciones japonesas debido a la preocupación de que Estados Unidos pueda estar encaminándose hacia una recesión, explicó Naka Matsuzawa, estratega jefe de Nomura Securities, a Nikkei Asia. "La caída no se está produciendo realmente por razones específicas de Japón".
De esa manera, Nikkei ha borrado todas sus ganancias de este año, pasando a una posición de pérdidas en lo que va del 2024.
Efecto dominó
El índice de referencia de Taiwán, el Índice Ponderado de Taiwán se desplomó más del 8%, arrastrado por las acciones tecnológicas y de bienes raíces, mientras que el S&P/ASX 200 de Australia cayó un 3,7% a 7.649,6.
En tanto, El Kospi de Corea del Sur bajó un 8,1%, por lo que sus operaciones tuvieron que suspenderse brevemente, y el índice Hang Seng de Hong Kong cayó un 0,2%.
Por su parte, el mercado de valores de China logró hoy un modesto progreso. Esta jornada el Índice Compuesto de Shanghái subió un 0,07%.
En ese sentido, el sector de servicios de China se expandió a un ritmo más rápido en julio, y el índice de gerentes de compras del país subió a 52,1 ese mes desde 51,2 en junio.
Aumento del desempleo e incertidumbre en EE.UU.
El viernes, en el último reporte del Departamento de Empleo estadounidense, se informó que se agregaron 114.000 puestos de trabajo en el mes de julio, menos que los 175.000 pronosticados por los economistas del London Stock Exchange Group. De esa manera, la tasa de desempleo en el país norteamericano subió al 4,3% en medio de expectativas de que se mantendría en el 4,1%.
El Nasdaq fue el primero de los tres índices de referencia en entrar en territorio de corrección tras el informe, con una caída de más del 10% desde su máximo histórico. El S&P 500 y el Dow se situaron un 5,7% y un 3,9% por debajo de sus máximos históricos, respectivamente.
Por su parte, la Reserva Federal mantuvo una reunión la semana pasada para tratar la política monetaria, en la que se acordó mantener la tasa objetivo en un rango de 5,25% a 5,5%, el nivel más alto en 23 años.
En ese contexto, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, adelantó que podría producirse un recorte de las tasas de interés en la próxima reunión del Banco Central en septiembre. "La pregunta será si la totalidad de los datos, la evolución de las perspectivas y el balance de riesgos son coherentes con una creciente confianza en la inflación y el mantenimiento de un mercado laboral sólido", explicó. "Si se supera esa prueba, una reducción de nuestra tasa de referencia podría estar sobre la mesa ya en la próxima reunión en septiembre", agregó.