Un hombre que huyó de EE.UU. hace dos décadas por presuntamente haber cometido un asesinato fue descubierto hace poco en el estado mexicano de Oaxaca, donde trabajaba como agente de Policía durante todos estos años.
Antonio 'El Diablo' Riaño, de 62 años, fue arrestado en el municipio de Zapotitlán Palmas y entregado este jueves a los alguaciles estadounidenses en la Ciudad de México. Cuando se le preguntó por qué decidió convertirse en un oficial, el detenido respondió que "quería ayudar a la gente de México".
"El crimen y la búsqueda"
Riaño fue acusado de asesinato en primer grado por presuntamente dispararle a Benjamín Becarra el 19 de diciembre de 2004, afuera de un bar ubicado en la ciudad de Hamilton, en el estado de Ohio (EE.UU.). De acuerdo con los testigos, los hombres tuvieron una disputa dentro del local, que luego continuó en el exterior. Una cámara de seguridad supuestamente captó el momento en que 'El Diablo' le disparó a Becarra en la cara.
Asimismo, los agentes del sheriff del condado de Butler encontraron imágenes de seguridad en las que aparecía comprando balas unas horas antes del crimen, mientras que el arma fue hallada debajo de las tablas del piso en su casa.
"Teníamos todas las pruebas que necesitábamos reunidas", dijo Mark Henson, un detective que se ocupó del caso en 2004. "Ya teníamos una acusación directa contra él. Sólo era cuestión de esperar para encontrarlo", manifestó. Riaño figuraba en la lista de los más buscados de la Oficina del Sheriff del condado de Butler, e incluso apareció en un episodio del programa televisivo 'America's Most Wanted' ('Los más buscados de América', en español).
Posteriormente, los agentes averiguaron que el hombre había huido a su ciudad natal en México y a través de su perfil en redes sociales se enteraron de que ahora trabajaba en el Departamento de Policía de Zapotitlán Palmas. "Pensé: '¡Dios mío, ahí está!'", recordó Paul Newton, exagente que se ocupó del caso y que actualmente trabaja para la Fiscalía del condado de Butler. "Un poco más canoso, un poco más viejo, pero era él", sostuvo.
Cuanto huyó de Ohio, Riaño dejó a su esposa y tres hijos. Su familia ya fue notificada sobre su detención y extradición a EE.UU. No obstante, el acusado niega haber cometido el asesinato. "No, no lo hice", declaró.