La exministra de Mujeres, Géneros y Diversidad de Argentina, Elizabeth Gómez Alcorta, negó este martes haber recibido una denuncia por parte de Fabiola Yáñez, expareja del expresidente Alberto Fernández, por presunta violencia "física y mental".
La referente feminista, que fue funcionaria de la cartera eliminada por el Gobierno de Javier Milei, se pronunció a través de la red social X para, primero, solidarizarse con Yáñez.
"La violencia de género es una realidad que atraviesa transversalmente la sociedad y en los ámbitos de poder esa violencia se refuerza", sostuvo, y aseguró que siempre estuvo "del lado de las mujeres y las niñas" sin importar "quién está en frente".
"Fabiola nunca me comentó esta situación. Nadie puede dudar de lo que habría hecho en ese caso", dijo, y recordó que cuando se violaron derechos de mujeres indígenas presentó su renuncia al cargo.
La periodista Sandra Borghi aseguró en el canal Todo Noticias que la ex primera dama habló con las autoridades del Ministerio de Mujeres sobre lo que estaba padeciendo, pero no dieron importancia a sus acusaciones. "Ya va a pasar. No se puede hacer nada", fue la respuesta, de acuerdo a lo reportado por Radio Mitre.
En otro tramo de su comunicado, Gómez Alcorta defendió el rol que tuvo su ministerio hasta su cierre, en diciembre de 2023. Además, apuntó contra quienes "despotrican contra las políticas de género" y contra los medios de comunicación, que solamente están "sacándole jugo" a la noticia, consideró.
Grave denuncia
Fabiola Yáñez, expareja del expresidente argentino Alberto Fernández (al frente del Gobierno entre 2019 y 2023), decidió demandarlo por haberle infligido "violencia física y mental" en una audiencia virtual presidida por el juez Julián Ercolini, a cargo de una investigación por tráfico de influencias contra el exmandatario y que sigue en curso en tribunales federales de la nación suramericana.
El exmandatario negó los hechos a través de un breve comunicado publicado en sus redes sociales. También aseguró que presentará "ante la Justicia las pruebas y testimonios de lo que realmente ocurrió".
"Solo voy a decir que es falso y que jamás ocurrió lo que ahora se me imputa", dijo el dirigente peronista, que prefirió no hacer declaraciones públicas.