La organización civil e indígena de México Las Abejas de Acteal denunció esta semana la violencia que viven los pueblos originarios por parte del crimen organizado en el estado de Chiapas.
El martes, la entidad realizó una jornada de ayuno y oración para exigir la intervención de las autoridades estatales y federales. Además, reiteraron su apoyo a los indígenas desplazados de la región.
Según la organización, al menos tres comunidades quedaron completamente despobladas debido a los constantes ataques y amenazas de bandas armadas.
"Nos duele el sufrimiento de las familias de Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán y en otras partes de México por la violencia que han causado los grupos criminales en Chiapas y en México", señala un comunicado de las Abejas de Acteal.
Además, el grupo instaló un campamento civil para recibir a los desplazados debido a la violencia, que se intensificó en los últimos meses.
La coordinadora de las Abejas de Acteal, Guadalupe Vázquez Luna, opina que es imposible el retorno a sus hogares hasta que el Estado tome medidas para garantizar la seguridad.
"Mientras el Estado no haga nada para resolver los conflictos que se están viviendo, la violencia irá en aumento", dijo la referente de la ONG.
En ese sentido, reclamó que el Estado mexicano garantice la seguridad y empiece a investigar y castigar a los responsables. De lo contrario "no va a haber tranquilidad, no va a haber paz", manifestó.
La ONG estima que en las zonas originarias de los Altos de Chiapas al menos 2.000 indígenas resultaron víctimas de desplazamiento forzado. Centenares de personas se refugiaron en Guatemala.