William Lester Suff, asesino en serie que se halla en el corredor de la muerte, ha confesado que fue el autor del homicidio sin resolver de una chica de 19 años ocurrido en California (EE.UU.) en 1986, anunció el alguacil del condado de Los Ángeles, Robert Luna, durante una rueda de prensa celebrada el martes.
Los investigadores dijeron que, al darse cuenta de que no se había analizado el ADN recogido en la escena del crimen, lo hicieron y detectaron en la ropa de la víctima el ADN de Lester Suff —también conocido como el asesino de Lake Elsinore—, tras lo cual admitió su culpa.
El reo dijo que había conocido a la víctima en un taller de reparación de ordenadores donde él trabajaba y ella accedió a ir en su coche, indicando que le "enfureció" cuando ella golpeó las gafas que llevaba puestas durante una pelea. Asimismo, detalló que, tras asestarle varias puñaladas, arrojó su cuerpo inerte a la acera y se dio a la fuga.
"Creemos que estamos aportando a la víctima y a su familia una sensación de justicia y una conclusión que estaban pendientes desde hacía mucho tiempo", declaró Luna, asegurando que este caso pone de relieve "el poder de la ciencia forense moderna".