Un niño de cuatro años rompió accidentalmente un jarrón de la Edad de Bronce en el Museo Hecht de la Universidad de Haifa, en Israel, mientras visitaba el lugar junto con su familia la semana pasada.
La valiosa pieza que data de entre 2.200 y 1.500 a. C. estaba exhibida sin barreras ni paredes de cristal porque el museo considera un "encanto especial" hacer que los hallazgos arqueológicos sean más accesibles al público, explicó a The Independent Inbal Rivlin, directora del establecimiento.
El museo no tomó ninguna medida contra la familia y, al contrario, invitaron al menor y a sus padres a una visita guiada días después.
Rivlin detalló que el milenario jarrón pertenece a la época anterior a los reyes bíblicos David y Salomón, y es característico de la región de Canaán. El "impresionante hallazgo" estaba destinado al almacenamiento y transporte de vino y aceite de oliva, añadió.
El establecimiento ha recurrido a un especialista en conservación para restaurar el objeto destruido, que esperan ponerlo de nuevo en exhibición en "poco tiempo".