Dimiten un ministro y un diputado en Honduras por un viejo video con narcotraficantes

La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, aceptó este domingo la renuncia del ministro de Defensa, José Manuel Zelaya, y nombró en su lugar a la precandidata presidencial Rixi Moncada.

Zelaya, que es sobrino de la presidenta, presentó su dimisión este sábado para no obstaculizar la investigación por los presuntos vínculos con narcotraficantes de su padre, Carlos Zelaya, y para permitir que se realice "con toda libertad".

Por su parte, el sospechoso renunció horas antes tanto a su cargo de secretario general del Congreso Nacional y al de diputado. Ofreció también algunas declaraciones a un grupo de periodistas sobre los motivos del escándalo, que se remontan a una reunión sostenida hace 11 años con varias personas que, dijo, no conocía en ese entonces.

"No más golpes de Estado": la dura advertencia de Xiomara Castro tras "injerencia" de EE.UU.

El encuentro, del que la investigación tiene constancia por un video, se centró en una oferta para aportar a la campaña electoral de Carlos Zelaya como candidato del ahora gobernante Partido Libre (Libertad y Refundación). El hombre, que es también hermano del expresidente Manuel Zelaya (2006—2009), le pidió disculpas por mencionar su nombre en la reunión en cuestión sin haber recibido el aval para hacerlo.

Finalmente, Carlos Zelaya aseguró que "nunca hubo entrega de dinero" a él personalmente por parte de estas personas identificadas ahora como criminales.

El político está dispuesto a declarar tanto ante las autoridades nacionales como ante las de otros países potencialmente interesados en la investigación y, al mismo tiempo, espera que esta situación no afecte al Gobierno de Xiomara Castro.

Por su parte, Manuel Zelaya ha convocado a la coordinación nacional del Partido Libre para este 1 de septiembre con el fin de abordar la aparición de su hermano en el video de 2013 con personas acusadas de narcotráfico y sus recientes declaraciones.

• El pasado miércoles, Castro dio por terminado el tratado de extradición que su país tenía con EE.UU. con un duro pronunciamiento en contra de este último, en el que lo acusó de "injerencia e intervencionismo", así como de querer "dirigir la política de Honduras a través de su Embajada".  
• "La injerencia y el intervencionismo de los EE.UU., así como su intención de dirigir la política de Honduras a través de su Embajada y otros representantes, es intolerable", escribió en su cuenta de X.
• "Yo quiero prometerle al pueblo hondureño: no más golpes de Estado y que no voy a permitir que se utilice el instrumento de extradición para intimidar o chantajear a las Fuerzas Armadas de Honduras", aseguró la mandataria en declaraciones ofrecidas a la prensa este jueves.